El papa Francisco llegó este sábado a Milán para iniciar su primera visita como Pontífice a la ciudad del norte de Italia, que incluirá un rezo en el tradicional Duomo, un almuerzo con detenidos y una misa en las afueras de la ciudad que movilizarán en total más de 400.000 personas.
El Pontífice aterrizó en el aeropuerto Linate de Milán apenas pasadas las 8 locales (4 de Argentina) e inició su visita de un día con un encuentro con personas en dificultad de la “Casa Blanca”, un centro de acogida de la periferia milanesa, al que llegó en papamóvil por la Via Salomone.
Luego Francisco rezará el tradicional Ángelus en la Plaza del Duomo de Milán, para después trasladarse a la prisión de San Vittore, donde almorzará y encontrará “uno a uno” a los casi 400 detenidos del lugar. Está previsto que pueda tomar una pequeña siesta dentro de la misma prisión.
La Palabra de Dios es una fuerza viva, capaz de suscitar la conversión en el corazón de los hombres.
— Papa Francisco (@Pontifex_es) March 25, 2017
La visita papal culminará con una misa en el Parque Monza de las afueras de Milán y luego un encuentro con jóvenes en el estadio San Siro, antes de volver a Roma hacia las 19.30 locales.