“Volvería a hacer exactamente lo mismo”, dijo hace algunas semanas Oscar Ruggeri sobre aquella patada que intentó pegarle a José Luis Chilavert en un partido entre Vélez y San Lorenzo en Liniers en 1996. “Le tiré a quebrar las dos rodillas y lo toqué un poco porque le avisaron”, explicó el Cabezón al referirse a aquella jugada. La respuesta del ex arquero paraguayo no tardó en llegar….
En una entrevista con Diario Popular, Chilavert redobló la apuesta: “Con Ruggeri, no tomaría un café. Hace poco dijo que, si volviera a tener la oportunidad, me fracturaría. Ahí te das cuenta de que hay un rencor de su parte. Es muy fácil hacerse el guapo por televisión. Hagamos un desafío, armemos un ring en Vélez o en Boca y peleamos a cinco rounds, a ver quién queda de pie. Que todo el mundo pague $10 mil la entrada y la recaudación se la damos al Garrahan. Ah, y no vale correr en el ring”. El ex arquero, de 51 años, agregó: “Si es tan guapo, lo veremos ahí. A cinco rounds, y el que corre, pierde”.
Las diferencias entre Chilavert y Ruggeri son de hace tiempo, pese a que a principios de la década del ’90 fueron compañeros en Vélez. Aquella tarde del 6 de agosto de 1996, el Fortín, que luego se consagraría campeón de ese torneo Clausura, goleó 4-1 a San Lorenzo en Liniers. Ya sobre el final del encuentro, Ruggeri intentó darle una fuerte patada a Chilavert.
Ángel Sánchez, árbitro de aquel partido, ni siquiera amonestó a Ruggeri. Héctor Veira, por entonces DT del Ciclón, decidió cambiarlo y sacarlo de la cancha. Durante muchos años, recordaron esa jugada; hoy, más de 20 años después, el fuego cruzado sigue caliente.