El presidente estadounidense estableció este martes las nuevas directrices para llevar a cabo las deportaciones, entre ellas acelerar el proceso legal, dar más capacidad a los agentes y eliminar las exenciones aplicadas por la Administración de Barack Obama.
Sin embargo, el Gobierno de Trump eximió de las directrices de control migratorio emitidas este lunes por el Departamento de Seguridad Nacional, que expanden la capacidad de deportar, a los jóvenes indocumentados (“dreamers” o “soñadores”) que llegaron a Estados Unidos como menores de edad.
