Se conocen del barrio y de la escuela, por eso la confianza terminó traicionando a una nena de 12 años que fue agredida sexualmente por tres adolescentes que la sometieron y filmaron los abusos con un teléfono celular. Los detalles del caso son aberrantes y habría pruebas contundentes, aunque por tratarse de menores la pena sería restringida.
El hecho se registró el sábado, alrededor de las 19, en una vivienda ubicada en el barrio San Miguel de la localidad de Oberá, donde reside uno de los acusados.
A consecuencia del brutal ataque, la niña debió ser internada en el Hospital Samic local para curaciones, al tiempo que fue sometida al tratamiento de profilaxis que indica el protocolo en casos de abuso sexual.
Asimismo, fuentes del caso también indicaron que se halla recibiendo asistencia psicológica.
En tanto, si bien los tres acusados fueron identificados, hasta el momento la Policía sólo logró dar con el paradero de uno, identificado como Fernando (15), quien por orden del Juzgado Correccional y de Menores fue puesto en guarda de su madre.
Los otros dos sospechosos también son menores y, al cierre de esta edición, continuaban sin ser ubicados por los pesquisas. Se trata de Ezequiel (14) y Abelardo (15), en cuyo domicilio se produjo el aberrante hecho.
La denuncia del hecho fue radicada el sábado ante la Comisaría de la Mujer de la Unidad Regional II por parte una mujer de 45 años, madre de la nena atacada.
La causa fue caratulada como “abuso sexual con acceso carnal”, puesto que se confirmó que la víctima presenta lesiones compatibles con lo expresado.
En su declaración, la progenitora relató que esa tarde su hija salió en compañía de una amiga de 14 años y se dirigieron a la casa de ésta, como solían hacer habitualmente.
Ya de tardecita, las menores regresaban al domicilio de la primera cuando a la altura de avenida Yerbal Viejo y calle 3 fueron interceptadas por tres jóvenes, quienes las invitaron a tomar tereré en la casa de uno de ellos. Aparentemente, no había mayores en el lugar.
Todos conocidos
Si bien la víctima aún asiste a la escuela primaria, como son todos conocidos del barrio e incluso la chica de 14 años asiste al mismo colegio que al menos dos de los agresores, las menores aceptaron a pasar al corredor.
Fue así que uno de los acusados le habría dicho a la nena que lo acompañe adentro para preparar más tereré y luego ingresaron los otros dos.
Transcurridos unos minutos, la amiga comenzó a inquietarse y escuchó que la víctima le pedía auxilio porque no la dejaban salir de la habitación.
Desesperada, la menor trató de interceder ante los captores, pero no tuvo suerte y decidió correr hasta la casa de su compañera para así avisar a su madre. De lo contrario, la pequeña habría seguido siendo ultrajada.
Inmediatamente, la progenitora se dirigió hasta el lugar y encontró a su hija en estado de shock.
Los agresores, en tanto, escaparon.
Luego se dirigió a radicar la correspondiente denuncia y la nena fue trasladada al Samic, donde fue sometida a los análisis de rigor. Para completar el cuadro terrorífico que padeció la criatura, aseguró que uno de los acusados filmó los abusos con su teléfono celular.
Por otra parte, en el allanamiento a la vivienda señalada personal de la División Criminalística secuestró una prenda de vestir íntima de la víctima, lo que sería una prueba clave en el caso.
Antecedentes cercanos
A mediados de enero pasado, una niña de 12 años denunció que cinco jóvenes la sometieron sexualmente en el barrio Caballeriza de Oberá. Entre los acusados había tres menores de edad, todos vecinos de la víctima.
“Entre los cinco me violaron y se pasaban el celular para filmarme. Me quiero morir. Tengo mucha vergüenza por lo que me hicieron”, mencionó entonces la pequeña.
La causa fue caratulada como “privación ilegítima de la libertad y abuso sexual con acceso carnal agravado por la participación de menores”.
En tanto, a fines de abril, una menor de 14 años que fue encontrada desnuda y en coma alcohólico en la cama de una pieza de alquiler del barrio Mate Rojo, también de Oberá.
La víctima relató que fue abusada sexualmente por al menos cuatro sujetos, dos de ellos menores de edad, tras haber sido engañada por un joven de 18 años, al que días antes conoció por Facebook.
El examen toxicológico posterior determinó que consumió un “cóctel de vodka con sustancias alucinógenas”. Luego del hecho la menor y sus padres se mudaron a otra localidad de la provincia.