El Papa Francisco recibió este jueves en el Vaticano a los reyes de Holanda, la argentina Máxima Zorreguieta y su esposo Guillermo Alejandro, en la primera visita oficial de la corona protestante al centro del catolicismo.
“Encantada de verlo de nuevo”, saludó Máxima, en español, al pontífice argentino, quien la recibió junto a su esposo a las 10 hora de Roma (5 de Argentina) en la sala del Tronetto del palacio Apostólico para iniciar un encuentro privado de 35 minutos.
Se trató de la tercera audiencia entre los monarcas y Jorge Bergoglio desde la entronización del pontífice hace cuatro años. La primera, cuando aún era princesa, fue en 2013 y la última fue el año pasado, cuando la familia real holandesa fue recibida de manera privada por el Papa.
Como en esa oportunidad, Máxima vistió de negro ya que al pertenecer a una corona protestante no puede acceder al denominado “privilegio de blanco” que sí tienen las reinas católicas de Europa como Sofía y Letizia de España y Matilde de Bélgica.
Máxima, nacida en Argentina en 1971, es católica; pero su esposo el rey Guillermo, protestante, fe en la que educan a sus hijas.
La de hoy fue la primera visita oficial de la historia de la corona holandesa a la Santa Sede, y los reyes estuvieron acompañados por el canciller Bert Koenders y la ministra de Comercio Exterior y Cooperación Internacional, Lilianne Ploumen.