Teléfonos de segunda mano: la gran apuesta de las marcas y las cadenas para reactivar el mercado de los celulares

Junto con la formalización del negocio y la llegada del iPhone, en el sector confían que la venta de equipos reacondicionados se puede triplicar

Si bien está muy lejos del glamour que puede tener el lanzamiento del nuevo modelo de Samsung o la esperada llegada del iPhone 7, el negocio de los smartphones de segunda mano es la gran esperanza de todos los jugadores en el mercado de la telefonía para reactivar un rubro que empezó a dar señales de estancamiento.

A nivel local se trata de un negocio incipiente -hoy no llega al 2% del total de las ventas de celulares-, pero con un enorme potencial, lo que explica que cada vez más empresas hayan puesto la mira en el sector, desde grandes fabricantes de equipos como la argentina BGH y la multinacional Brightstar hasta cadenas de retail como Frávega o firmas creadas específicamente para atender este nicho como Trocafone. En la industria aseguran que no es demasiado ambicioso pensar que en el corto plazo, el negocio del usado formal -es decir, excluyendo la venta de robados- supere el 5% del total del mercado, lo que implica entre 600.000 y 650.000 unidades, y una facturación cercana a los US$ 100 millones anuales, a un promedio superior a los 140 dólares por teléfono.

La venta de celulares usados y reacondicionados ya es uno de los principales motores de la industria a nivel mundial y, según un estudio de la consultora Deloitte, se espera que este año la demanda de estos equipos pegue un salto del 50%, con un total de 120 millones de smartphones de segunda mano comercializados, frente al modesto crecimiento del 11% que tendrá el negocio de celulares nuevos. En dólares se trata de un mercado que se proyecta que este año moverá en todo el mundo US$ 16.800 millones y representará el doble de la facturación que tiene un negocio con mucha más prensa como el de los relojes inteligentes. Y lo que es más interesante para las empresas es que, a diferencia de lo que podría pensarse, no es un mercado que esté directamente relacionado con la falta de ingresos de la población, ya que en países de alto poder adquisitivo como Alemania o Inglaterra los celulares usados representan 15% del mercado total y con una tendencia en ascenso.