El amistoso que la Selección argentina iba a disputar el sábado en Jerusalén ante la Selección de Israel quedó suspendido, luego de la escalada de violencia, amenazas y críticas del gobierno palestino que recibieron Lionel Messi y la delegación nacional en Barcelona. El presidente de la AFA, Chiqui Tapia, encabezó una breve conferencia de prensa en la que no admitió preguntas.
“Les pedimos disculpas a todos. La idea era dar un mensaje de paz y que no tiene nada que ver con la violencia”, aseguró el presidente de la AFA que señaló que las amenazas al plantel argentino fueron el principal motivo de la suspensión del encuentro.
“Mi responsabilidad es la de bregar por la salud y la integridad física de toda la delegación y en mi función tomé esta decisión”, afirmó Tapia. La cancelación del encuentro en el Teddy Stadium fue el corolario de un martes repleto de rumores, que se inició con la protesta de ciudadanos pro-palestinos en los alrededores de la Ciudad Deportiva del Barcelona, donde el equipo se prepara antes de emprender su viaje a la Copa del Mundo.
“Los que piensan que somos ignorantes creo que nos subestiman, estamos ante una realidad que lleva 70 años, porque hace 70 años que se viven estas situaciones”, lanzó Tapia respondiendo a las acusaciones que llovieron contra la cúpula dirigencial de la AFA por haber aceptado el amistoso en Jerusalén.
El conflicto no era deportivo sino político. Las charlas a nivel gubernamental para mantener el encuentro existieron, porque este amistoso había sido promovido incluso por el presidente Mauricio Macri, en virtud de sus relaciones económicas crecientes con Israel. Sin embargo, la AFA decidió suspenderlo.
Hasta el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, llamó el martes al Presidente para pedirle que interceda ante la AFA y evite la cancelación del juego, para el que se agotaron las 35 mil entradas en diez minutos.
Según la Agencia Judía de Noticias, Netanyahu tomó la decisión de contactar a Macri ante los fuertes rumores que comenzaron a acrecentarse a lo largo del día. Pero el Gobierno subrayó que “no participa ni tiene injerencia alguna en la organización” del suspendido partido.
El tema del partido con Israel es parte de la confusión en la que está sumida la AFA y la Selección argentina. De hecho, también fue un papelón lo que ocurrió con la supuesta visita al Papa Francisco. Después de muchas idas y vueltas y anuncios desde el Vaticano, desde la AFA desmintieron la información y aclararon que el viaje no estaba en agenda.