“Una persona de buen corazón ha donado el terreno para construir las casas de los vecinos que sufrieron el incendio. Necesitamos voluntarios para construir”, escribió emocionado ayer en su cuenta personal de Facebook el padre Gervacio Silva, a cargo de la Parroquia de Santa Rita, donde desde el sábado pasado permanecen alojadas siete familias que resultaron damnificadas por el incendio en el inquilinato de la chacra 100. El grupo de afectados se completa con otras cinco familias que fueron ubicadas en el salón parroquial correspondiente a la ermita Nuestra Señora de la Asunción.
La publicación del párroco rápidamente se viralizó sumando cientos de buenas voluntades que se comprometieron a ayudar a los afectados, quienes hasta ayer transitaban los días envueltos en incertidumbre y congoja en torno a su futuro.
Consultado al respecto, el sacerdote Alberto Barros, titular de Cáritas Diocesana, relató que ayer por la mañana mantuvo una reunión con un particular que ofreció donar 12 lotes en el barrio Ñu Porá, de Garupá, para la construcción de viviendas destinadas a los afectados. “Fue una conversación con un vecino muy solidario y que no quiere dar a conocer su nombre por el momento. Es un acto de generosidad muy grande y los lotes estarán a nombre de las doce familias que accederán así a la vivienda con título de propiedad”, aseveró.
Barros indicó que luego de este encuentro, junto al padre Gervacio Silva, “nos encontramos en Santa Rita y comunicamos la noticia a los vecinos, que aceptaron y el viernes estaremos acompañándolos a que conozcan el sitio”.
El predio donado, con Cáritas como intermediario, se ubica en cercanía de la ruta 12 en la zona de la ex Garita. “Cuando estábamos ya desesperanzados ante la falta de respuesta del Estado, porque sólo Jorge Atencio (Coordinación de Tierra y Agua municipal) se acercó y se preocupó, aparece esta solución que es una bendición para estas familias que quedaron sin nada”, precisó el párroco.
El padre prevé que en dos semanas podrían estar casi listas las construcciones y dependerá de la ayuda de la comunidad, que pueda colaborar con trabajo voluntario.
El proyecto de levantar las casas demandará una inversión de 240.000 pesos en materiales; y la mano de obra la pondrán vecinos y colaboradores.
“Las casas serán del prototipo de Cáritas, con base de material, las paredes en madera y las aberturas, el techo de zinc y la instalación eléctrica”, describió. Los interesados en formar parte de esta labor solidaria pueden acercarse a la parroquia ubicada en avenidas Chacabuco y Monseñor D’Andrea.