Marcos Peña aseguró que en el segundo semestre la inflación “va a ir bajando todos los meses un poco o bastante” y recordó que el macrismo decidió evitar “una estrategia de shock” y hacer “un camino de cuatro años para ir bajándola progresivamente”.
“También vamos a ir viendo una mayor inversión pública en obras públicas y vamos a ir viendo una mayor actividad económica mes a mes. El segundo semestre no es un día, a lo largo de estos seis meses vamos a ir viendo esa tendencia de que, de a poquito, vamos a ir estando mejor día a día”, añadió el jefe de Gabinete.
También recordó que la “Argentina venía de una economía muy complicada”: “Nuestro mayor objetivo en el primer semestre era evitar una gran crisis, si Argentina seguía como venía terminaba en el camino de Venezuela”. Por eso, según agregó y en referencia a la tarifa social y al aumento de las asignaciones, “nos pusimos a trabajar para ir readecuando esa situación económica, cuidando a los más débiles con todas las medidas sociales que fuimos tomando”.
En una entrevista que publicó hoy el diario salteño El Tribuno, el funcionario macrista advirtió que “nunca una transición así es fácil, pero creemos que ha sido mucho mejor que una gran crisis como la que hemos vivido en la Argentina”. Además recordó que “uno de los ejes principales de nuestro gobierno, es ir hacia la pobreza cero, que va a llevar mucho tiempo pero que hay que ir cambiando la tendencia”.
Respecto de la situación a corto plazo, en este semestre, dijo que “se va a ir viendo una mejora mes a mes, centralmente de la inflación, que va a ir bajando todos los meses un poco o bastante”. Pero, señaló, “no creemos que el tema de la inflación haya nacido ahora ni mucho menos”.
“Ese es un tema que tenemos que desterrar, la inflación es algo malo para la Argentina, es malo para los argentinos y la enorme mayoría de los países del mundo ya la han logrado reducir”.
Y apuntó que desde el Gobierno “no fuimos por una estrategia de shock, bajar la inflación de un día para el otro, porque eso genera otros costos muy grandes. Hemos hecho un camino de cuatro años para ir bajándola progresivamente”.
Al ser consultado sobre la posibilidad de subir la edad jubilatoria a los 65 años, aseguró: “Hoy por hoy, nosotros no hemos planteado ese debate, aunque donde sí se ha planteado es en la ley de reparación histórica de los jubilados. Esa ley que va a ser justamente saldar una deuda de mucho tiempo de la Argentina con los jubilados recomponiendo haberes y al mismo tiempo pagando los juicios que se acumularon. Es importante crear una comisión para debatir el futuro del sistema previsional”.
Peña también defendió el incremento de las tarifas de gas y de luz al considerar que el Gobierno intentó marcar “un camino de concientización y ordenamiento para cuidar a los que menos tienen que los sectores que consumen más, tengan que pagar lo que corresponde”. Y respaldó al ministro de Energía y Minería, Juan José Aranguren, al advertir que la situación energética “no se cambia de un día para el otro” y que “él es la mejor persona para llevarlo adelante”.
