Se salvó de milagro. Pudo ser fatal, pero apenas se fracturó el hombro izquierdo, la nariz y un hueso del talón. Viktoria Schwarz, austríaca campeona del mundo de canotaje en K-2 500 en 2011 tuvo un episodio de sonambulismo, por el cual se tiró de su balcón, de siete metros de altura. Pero puede vivir para contarlo.
“He tenido un centenar de ángeles de la guardia”, dijo la deportista sobre el hecho. “Tomé pastillas para la tos antes de ir a dormir -explicó-. Sabía que un par de veces antes había tenido algún episodio de sonambulismo, pero nunca de este calibre. No puedo recordar nada en absoluto”. Tremendo.
Claro, por su lesiones Viktoria no podrá competir por un ben tempo, ni en el europeo de Moscú ni en los Juegos Olímpicos de Río de Janeiro, a los que todavía no había clasificado. Pero al menos podrá volver a subirse a un kayak algún día.