El chico había encontrado el arma en la casa de su amiga, en la localidad santafesina de Santa Rosa Calchines, donde se habían reunido con otros compañeros de la escuela. Estaban transmitiendo en ese momento un video en Facebook Live cuando empezó a manipular la escopeta como parte del juego.
Gatilló varias veces porque creía que el cargador estaba vacío. Pero la última vez que lo hizo, fue fatal. Se escuchó un sólo estruendo, le siguió un silencio que duró apenas unos segundos y después, empezaron los gritos. La nena ya estaba muerta.
Georgina Magalí Vega tenía 12 años al igual que su amigo, que disparó por accidente. La bala impactó de lleno en su cabeza. Aunque el error fatal del nene quedó grabado y fue seguido con impotencia por todos los que estaban observando la transmisión, la Justicia de Menores dispuso la intervención de la Policía de Investigaciones.
“En el pueblo nos conocemos todos y vamos a estar de duelo. Sabemos el esfuerzo del padre por criar a esta niña y por los demás”, manifestó Carlos Kaufmann, el presidente comunal de la localidad del departamento Garay a los medios locales. Se trata de una zona, a unos 40 kilómetros de la ciudad de Santa Fe, habitada por pescadores y trabajadores rurales, por lo que no es extraño que en las casas haya una escopeta, porque también es zona de caza.
El trágico hecho ocurrió en la localidad de Santa Rosa de Calchines, Santa
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