En un partido muy emotivo Mitre logró lo que para muchos era impensado, empatar una serie que venía cuesta arriba tras el 3 a 1 que había logrado el Brete en cancha de JG Brown la semana pasada.
En el primer tiempo el local entendió que era necesario salir a buscar el partido, con mucha intensidad, pero con poca claridad y profundidad frente a la experiencia del rival. El Brete supo manejar los tiempos de aquel primer tiempo, pero tampoco pudo inquietar a Holzer. Se fueron al descanso 0 a 0, dejando fuera del torneo al equipo local.
El Segundo tiempo tuvo un arranque dinámico, tal es así que Mitre tuvo la oportunidad de llegar al primer gol a los 2 minutos de juego. Tras un gran centro de Morcillo –una de las figuras de la cancha- y la “viveza” de Sosa para dejarse caer ante la embestida de Piñero. El arbitro no dudo y señaló la pena máxima. El encargado de ejecutarlo fue Comes que pateó fuerte al medio, nada que hacer para Cuevas. EL partido se ponía 1 a 0.
Mitre sabía que no era suficiente. Necesitaba más e iba a la carga. El Brete empezó a reaccionar y llegaba peligrosamente al arco del local.
El gol fue el condimento que le hacía falta al juego para que termine siendo lo que fue: excitante y emocionante. Los minutos se terminaban, Mitre no tenía ideas muy claras y abusaba del pelotazo; el visitante decayó físicamente y se tiró atrás. Tanta fue la presión del local que después de un tiro de esquina jugado corto hacía Morcillo, éste remató al arco y la puso en el segundo palo, para poner el 2 a 0 y despertar la ilusión de su gente que había ido a apoyar a su equipo cuando las cosas estaban complicadas en la serie.
Se terminaba el partido, Mitre había conseguido el empate en la serie y los penales estaban a la vuelta de la esquina.
La nota de color fue que faltando 2 minutos de partido el DT de Mitre cambió a su arquero titular por el suplente. Galeano ingresó para la tanda de penales, haciendo honor de su fama de atajar penales.
Desde los doce pasos, falló el menos esperado. El capitán y figura de El Brete, Gamarra, la tiró por encima del travesaño. No hubo mayores sobresaltos en las siguientes ejecuciones hasta llegar al último penal, a cargo de Comes, que tampoco dudó y clasificó a su equipo, que frente a una multitud en Rocamora, dio una muestra de carácter y hombría.
Rocamora está de fiesta, Mitre avanza en el Federal “C” y sueña con el ascenso.
