El perfil era de Nahir Galarza en Instagram estaba oculto desde que se hizo público el homicidio de Fernando Pastorizzo. Para ver qué imágenes había compartido se debía pedir una solicitud y ella debía aprobarla. Claro que ahora no es ella la que maneja sus cuentas en las redes sociales. Se cree que es una estrategia de sus abogados. Pero, ¿qué buscan?
En principio, una de las fotos que fueron borradas de la cuenta de la joven es la que la muestra de vacaciones junto a su familia y a Fernando. Además, tampoco figura el posteo con el que se había despedido del joven antes de confesar la autoría del crimen, en el que aseguraba que habían mantenido cinco años de una relación “con idas y vueltas”.
En las publicaciones se la ve posar, modelar y seducir. La adolescente estudiante de arquitectura compartió fotos muy subidas de tono, pero en ninguna queda claro (dado que borró las evidencias) si estaba o no soltera. Y el “Brasil gate” fue uno de los principales dolores de cabeza para Víctor Rebossio, abogado de Nahir.
Marcelo Galarza, padre de la detenida, aseguró en un primer momento que sólo había compartido un día con Fernando y que la relación con su hija no era formal. Las vacaciones familiares hablan de otra realidad.
El otro posteo comprometedor fue la Storie que la joven compartió luego de que se hiciera público, al menos en Gualeguaychú, del asesinato de Fernando. “Cinco años juntos, peleando, yendo y viniendo; pero siempre con el mismo amor. Te amo para siempre, mi ángel”, afirmó Nahir luego de asesinar a quien había sido su novio. Y lo acompaño con una imagen íntima de ambos.
Las Stories se eliminan automáticamente cada 24 horas, pero uno de los seguidores de Nahir llegó a capturar su mensaje antes de que desaparezca. Luego el candado fue puesto ni bien se conoció que la joven se había entregado a la Justicia. Antes del asesinato tenía 57 fotos subidas a la plataforma pero ahora hay 55.
Pese a los esfuerzos, no hay dudas que la finalidad de la reapertura de la cuenta es distraer, generar ruido y que se hable más de la joven que de lo que hizo. Lo mismo ocurrió cuando dieron a conocer diez imágenes de Nahir que repasaban su infancia y su crecimiento. Se intentó hacer crecer la imagen de una joven estudiante de abogacía, buena hija y educada, que cumple con cierto tipo de belleza y por la que deseaba modelar y de hecho, lo hacía.
Pese a cualquier estrategia, Nahir está detenida e imputada por el crimen de quien fue su novio. Le disparó a Fernando Pastorizzo, de 20 años, mientras viajaban en la moto, en pleno movimiento. Le tiró en la espalda y luego de caer al piso le disparó de frente en la cabeza. Lo dejó desangrarse y huyó. Llegó a su casa, se bañó, se acostó y se durmió.
La defensa quiere evitar demostrar que eran pareja. Si se llega a comprobar que eran novios, podrían condenarla a perpetua, al tratarse de un homicidio agravado por el vínculo. Y para eso, la clave serán los resultados de la pericia de los celulares. Se analizarán los mensajes y archivos compartidos.