La Corte Suprema de Justicia ratificó por 5 votos a 0 la condena al cura Julio César Grassi. Se trataba de la última instancia de apelación. En 2009, Grassi fue condenado a 15 años de prisión por abuso sexual y corrupción de menores. Desde 2013, está detenido en el penal de Campana. En abril de 2015, la Justicia determinó que se confirme la condena y se revoque la absolución en los otros dos casos.
En esa oportunidad, la procuradora fiscal ante la Corte Suprema de Justicia, Irma García Netto, dictaminó que correspondía revocar la decisión en los expedientes en los cuales el sacerdote había resultado absuelto por el abuso sexual de dos menores que también estaban bajo su guarda. La funcionaria judicial pidió que se dicte una nueva sentencia conforme a derecho.
A mediados del año pasado, el abogado querellante en la causa, Juan Pablo Gallego, denunció que los jueces de la Corte Suprema estaban siendo presionados desde el penal de Campana, donde está detenido el cura. Según Gallego, estamos frente a una causa “en la que está absolutamente probado el abuso del cura sobre tres menores, es un caso muy fácil, la dificultad deriva sólo del poder de Grassi”.
En esa oportunidad, Gallego se esperanzó en que “después de la feria judicial, cuando la Corte va a estar integrada por los cinco ministros, se avance en un fallo ejemplar”.
“Quedó firme la sentencia dictada por el Tribunal en lo Criminal N°1 de Morón, Provincia de Buenos Aires, que condenó a Grassi de 15 años de prisión como autor reiterado de los delitos de abuso sexual agravado por resultar sacerdote, encargado de la educación y guarda del menor-víctima en concurso real entre sí, que a su vez concurren idealmente con corrupción de menores agravada por su condición de encargado de la educación y de la guarda, cometidos en perjuicio de O.A.A”, explicó el Máximo Tribunal.