La situación de Sebastián Driussi hoy es verdaderamente un enigma. Todos se preguntan qué está pasando con el delantero de River. Todavía no fue vendido al Zenit de Rusia, pero fue excluído de la lista de buena fe de la Copa Libertadores, y hoy trascendió que quería jugar hoy en Paraguay ante Guaraní. Sin embargo, no está. Y en el medio los rumores sobre el doping que finalmente no fue.
“Driussi tomó la decisión de irse y se lo comunicó a Gallardo. De hecho River no lo transfirió. Pero está con la cabeza en otro lado y por eso el técnico decidió sacarlo de la lista de buena fe”, contó el manager Enzo Francéscoli desde Asunción, donde River jugará esta noche por los octavos de final de la Libertadores.
Sin embargo, y al mismo tiempo, Driussi le mandó un mensaje de Whatsapp a un periodista del programa ESPN Fútbol Club en el cual le aclaró que “yo moría por jugar hoy”. Esto daría por tierra los argumentos de River.
“Hasta que Zenit no pague, Driussi seguirá siendo de River. Se complicó por los rumores del doping que preocuparon a los rusos, pero estamos negociando”, contó Francescoli sobre el retraso en la operación.
“Yo moría por jugar hoy”, le escribió Driussi por mensaje de WhatsApp a un periodista que lo dio a conocer en ESPN.
Si Driussi quería jugar hoy, entonces desmiente los argumentos de River, y resulta llamativa su salida de la lista de buena fe (en su lugar entró Ignacio Scocco) cuando todavía hay tiempo para cambiar jugadores hasta antes del partido revancha de octavos de final (8 de agosto).
En la Conmebol ya confirmaron que Driussi no está involucrado en los casos de doping, pero aunque todavía no fue vendido a Rusia, en River se dieron el lujo de no contarlo para la Libertadores. Y es el goleador del equipo. Todo muy extraño: ¿Qué pasa con Driussi?
