¿Hacen cualquier cosa por un click? Sí, por un click, por un beso o por ambas cosas. Eso le pasó a Will Zeven, un joven peruano que estaba grabando la tercera edición de su reto llamado, atentos porque se mató con el nombre, “Beso o patada en los huevos”.
Si no fuiste a Harvard igual lo vas a entender: lo que hace es encarar a chicas y desafiarlas a piedra, papel o tijera. Si gana, beso. Si pierde, patada ahí.
Jugó con una chica, perdió, y ahí ella reveló la verdad a cámara: “Había olvidado decirle que sabía karate”, dijo. LETAL.
Después de la TREMENDA patada, el chico no pudo caminar bien durante tres días, y siguió con dolor varios días más. Tras el suplicio, decidió ir al médico.
¿El diagnóstico? Duele de escucharlo: “estallamiento testicular postraumático”. La solución fue extirparte el testículo. Ah, decidió grabarlo.
¡Lo más triste es que ni siquiera consiguió tantas visualizaciones! ¿Qué hará para su próximo desafío?