Puede efectuarse aplicando diferentes colores sobre el paciente, mediante lámparas especiales, o sencillamente haciendo que dicho individuo se centre en la observación de estos colores.
Sea como sea, esta forma de medicina alternativa ha demostrado ser más efectiva de lo que en un principio pueda parecer y por eso hoy queremos introducirte un poco en su mundo y sus maravillosas propiedades curativas. A continuación te dejamos una pequeña muestra de su funcionamiento. Un pequeño aperitivo que puede abrir el apetito de tu curiosidad.
Verde
Este es el color del balance y la armonía que conecta directamente con la fuerza vital universal. El verde es el color más básico e importante dentro del tratamiento con la colorterapia. Se usa tanto al comienzo como al final de la sesión de curación y se puede aplicar sobre todo el cuerpo o enfocarlo en alguna zona concreta.
Este color ayuda a expulsar la toxicidad de nuestro cuerpo y es muy recomendable para tratar huesos y coyunturas doloridas. Es además de gran ayuda para las personas que padecen de hiperactividad, gracias a su potente efecto calmante.
Amarillo
El amarillo es el color de la sabiduría y la consciencia. Se debe aplicar de manera concentrada y en zonas pequeñas, principalmente sobre la cabeza y el cuello.
Este color ayudará a paliar los síntomas de las enfermedades mentales, activará el riego sanguíneo del cerebro y mejorará la respiración. Además mejorará la atención y el aprendizaje e influirá en un mejor funcionamiento del sistema endocrino.
Naranja
El color naranja es un poderoso estimulante, representa el amanecer y la bondad, por este motivo, no es aconsejable aplicarlo si se es una persona nerviosa o hiperactiva. Se suele aplicar por zonas, aunque en general la cabeza no es muy recomendable.
Este color activa la circulación de la sangre y fortalece el corazón, también ayuda a mejorar el funcionamiento del hígado y los riñones. Además es el color más recomendable a la hora de ayudar en el tratamiento del cansancio y la depresión.
Rojo
El color rojo es un gran influyente sobre las emociones y también un potente estimulante. Al igual que el naranja, no se recomienda utilizar sobre la cabeza ni con personas que tengan problemas con sus nervios o hiperactividad. Y se aplica por zonas.
El rojo actúa sobre el corazón y los pulmones, los problemas con los riñones y la vejiga y sobre las enfermedades de la piel y heridas de difícil curación. También es muy efectivo aplicándose sobre las articulaciones, ayudando con los problemas reumáticos.
Azul
El color azul representa la paz y la calma y es un poderoso relajante. Se puede aplicar sobre la totalidad del cuerpo durante las sesiones del tratamiento. No es recomendable para las personas con baja presión sanguínea.
Este color ayuda a combatir el insomnio, contribuye en la reducción de la presión sanguínea, actúa como relajante muscular y tiene propiedades antisépticas. También puede ayudar a combatir los problemas de ansiedad, nervios e hiperactividad.
Violeta
Este es el color de la espiritualidad, ayuda en la meditación, además de estimular la imaginación y agudizar la intuición. Se puede usar aplicándolo por todo el cuerpo pero el área más recomendable y efectiva es de cintura para arriba.
El color violeta tiene propiedades relajantes al igual que el color azul, pero además es muy bueno en el tratamiento de la osteoporosis y los síntomas de la menopausia. Además ayuda a un correcto funcionamiento del sistema nervioso y de la circulación de la sangre.
