La prueba del talón en recién nacidos es un sencillo test que, tal y como subrayan los expertos en pediatría, puede ayudar a reducir complicaciones y a adelantarse al diagnóstico de algunos trastornos severos que afectan a su salud. ¿Cuándo y cómo se realiza? Vamos a ver, más detenidamente, en qué consiste la prueba del talón y a tratar de resolver las dudas principales que asaltan a los padres, en especial a los padres primerizos.
¿Qué es?
La prueba del talón se realiza a los recién nacidos con el objetivo de detectar determinadas enfermedades metabólicas hereditarias, así como el hipotiroidismo congénito (trastorno provocado por la carencia o reducción de la actividad de las hormonas tiroides), fenilcetonuria (enfermedad genética hereditaria en la que no se metaboliza adecuadamente un aminoácido llmados fenilalanina) o la fibrosis quística (patología hereditaria que provoca alteraciones digestivas y respiratorias). ¿Por qué es importante realizar esta prueba? Precisamente porque permite detectar de manera precoz determinadas patologías que, aunque se consideran poco frecuentes y no siempre presentan síntomas, pueden ser desarrolladas por el recién nacido. La prueba del talón no es en sí una prueba diagnóstica, pero sí se adelanta al diagnóstico que confirmarán definitivamente las pruebas posteriores y específicas que se realizarán al recién nacido. Una vez que el diagnóstico sea certero, es importante iniciar el tratamiento adecuado a cada patología lo antes posible, siempre bajo la prescripción y vigilancia del pediatra.
¿Dónde y cuándo se hace?
La prueba del talón por lo general se realiza, a los dos días de nacer, en el centro hospitalario en el que se produce el nacimiento.
Un análisis sencillo que se basa en extraer unas gotas de sangre con un leve pinchazo en uno de los talones del recién nacido. Con las gotas de sangre se impregna un papel absorbente homologado, el cual será analizado posteriormente en el laboratorio. Además de la extracción de esta muestra, el médico también recabará los datos familiares y del bebé. En la mayoría de los casos, y esto es importante subrayarlo, los resultados son normales y el bebé no presenta ningún problema.