Restos fósiles de una especie de reptil volador de entre 250 y 66 millones de años de antigüedad y de nueve metros de largo, que según los investigadores es el más grande Sudamérica, fue presentado por científicos de la Facultad de Ciencias Exactas y Naturales y el Instituto Interdisciplinario de Ciencias Básicas de la Universidad Nacional de Cuyo (Uncuyo), informó esa casa de estudios.
Se trata de un “pterosaurios” (reptiles voladores) un orden extinto de saurópsidos arcosaurios voladores que existieron durante casi toda la Era Mesozoica y que fueron los primeros vertebrados en conquistar el aire, detalló la Uncuyo. Sus alas estaban formadas por una compleja membrana sostenida por el cuarto dedo de la mano, que estaba hipertrofiado.
El dinosaurio, bautizado “Thanatosdrakon amaru” fue presentado en el auditorio de esa facultad, en el Parque San Martín de la ciudad de Mendoza por Bernardo González Riga y Leonardo Ortiz, responsables del descubrimiento y miembros del Museo y Laboratorio de Dinosaurios.
Los huesos fósiles de Thanatosdrakon se encontraron en afloramientos ubicados en el sur provincial, en un yacimiento próximo al Río Colorado, en rocas de fines del Período Cretácico, cuya antigüedad se estima en 86 millones de años.
Los restos fósiles fueron hallados y preservados en un procedimiento de rescate efectuado durante la realización de obras civiles, por lo que los investigadores remarcaron la importancia de las acciones de protección patrimonial durante la ejecución de obras en sitios con alto potencial paleontológico.
“Los pterosaurios fueron un grupo muy singular de animales que vivieron desde el Triásico hasta el Cretácico y representan los primeros vertebrados que adquirieron la capacidad de volar activamente. Generalmente suelen confundirse con los dinosaurios, grupo cercanamente emparentado”, expresó Ortiz.