“Precios claros”:Los súper informarán más artículos

Crece la cantidad de productos cuyos importes están "obligados" a informar.

La secretaria de Comercio le exigió a las cadenas de supermercados una ampliación de la cantidad de productos que informan en “Precios Claros”. En esta aplicación, para celulares y computadoras,  se les brinda a los consumidores los importes de miles de artículos y sus variaciones por cadena.

Desde el próximo 30 de noviembre, las cadenas tendrán que detallar los precios de categorías que no se venían informando, como carne de cerdo, carne vacuna, higado, achuras, pollo, pescados y mariscos. También deberán exponer los importes de frutas y verduras.

En un formulario que la secretaría de Comercio le mandó a las cadenas se les explicita que ya no hay más rubros “optativos” (que los súper podían informar si querían), y que toda la canasta que está en “Precios Claros” debe ser reflejada en la aplicaciónm creada por el ministerio de Producción de manera “obligatoria”.

“El Gobierno quiere perfeccionar ‘Precios Claros’, mientras que ‘Precios Cuidados’ va perdiendo participación sobre el total de las ventas”, cuentan en las cadenas.

La aplicación de “Precios Cuidados” sirve para armar una suerte de changuito virtual, que permite calcular el presupuesto de los productos en las distintas cadenas y comparar en qué lugar resulta más conveniente hacer la compra.

Entre los productos que las cadenas venían informando voluntariamente y que ahora serán obligatorios están ananá, banana, ciruela, durazno, kiwi, limón, mandarina, manzana, naranj, pera, pomelo y uvas.

También se adicionan acelga, aji, ajo, batata, berenjenas, cebolla, hinojo, lechuga, papa blanca, papa negra, radicheta, recula, tomate, zanahoria, zapallitos y zapallos.

Los productos para mascotas estarán dentro de “Precios Claros”. En esa aplicación, además habrá mayor desglose en categorías de limpieza e higiene.

Los ejecutivos de las cadenas tuvieron una conversación con Javier Tizado, subsecretario de Comercio Interior sobre descuentos en diferentes formas de pago. Allí se habló de los electrodomésticos, que despachan tanto los súper como las cadenas especializadas. El funcionario planteó que si los consumidores abonaban en efectivo, deberían acceder a un precio diferente al que obtenían si abonaban en cuotas. Pero no se resolvió nada.

Los supermercadistas creen que el Gobierno quiere desalentar las ofertas del estilo “70% de descuento con la compra de una segunda unidad”, porque distorsiona los precios finales. En las empresas llegaron a suponer que el Poder Ejecutivo veía con simpatía que los consumidores accedan a rebajas si pagaban en efectivo en otras categorías. Pero desde el Gobierno lo niegan. Creen que el concepto que les quedó a las cadenas al respecto proviene de esa charla, que fue acotada a los electrodomésticos.

En medio de la discusión sobre la baja de comisiones en las tarjetas de crédito, los supermercados dicen que están en desventaja contra los almacenes -cuya participación en las compras cotidianas se recupera, al revés de lo que pasa con las góndolas-. Las cadenas aceptan plásticos, mientras los comercios tradicionales son más reacios a esa modalidad de pago. En el Poder Ejecutivo reciben las quejas sobre esa supuesta competencia desleal.

Tanto las cadenas como el Gobierno creen que seguirán los “precios cuidados” en 2017. Sin embargo, la participación de los productos de esa categoría sobre el total de las ventas habría caído este año en relación a 2015, según datos de los supermercados.

Martín Bidegaray