El miércoles pasado, en la ciudad de Río de Janeiro, cientos de personas que buscaban acceder al estadio olímpico João Havelange se vieron obligadas a esperar varias horas luego de que se informara de la pérdida de la llave que abría la entrada oriental de la instalación deportiva.
Según medios locales, fue necesaria la intervención de miembros del cuerpo de bomberos, que rompieron la cadena y el candado del portón de acceso con unas pinzas especiales.
Minutos antes, miembros del comité organizador negaron las circunstancias del incidente y señalaron que se trataba de un “problema operacional”.
Tras la confusión, se restableció la entrada al público que buscaba asistir al primer encuentro de la fase de grupos del torneo de fútbol femenino entre las selecciones de África del Sur y Suecia.
What a start! #Rio2016 kicking off with lost key and firemen forcing open lock to east gate of Olympic stadium #oops pic.twitter.com/7yj0moF9Ms
— Julia Carneiro (@juliadcarneiro) August 3, 2016
You queue up for 2h, gate 1h late to open, then oops we need to move u to next gate… #Rio2016 kickoff w/grumbles pic.twitter.com/H7gO3oSEI3
— Julia Carneiro (@juliadcarneiro) August 3, 2016