En Texas, Estados Unidos, un joven llamado Brett Sanders fue multado por exceso de velocidad: circulaba a 39 millas por hora (casi 63 km/h) en una zona donde la máxima legal es de 30 millas (48 km/h), es decir, 15 km/h más de lo permitido. Pero decidió pagar los 222,6 dólares de una manera muy especial…
Consiguió más de 22 mil monedas de un centavo, las que llevó en dos baldes completos al mostrador. Una vez allí, simplemente las dejó caer ante la mirada atónita de la cajera. Claro que se grabó y compartió el video en las redes sociales…
Sanders le dijo a la CNN que la multa le pareció injusta porque no dañó ni puso en riesgo a nadie.