Habrá una millonaria recompensa para quienes aporten datos que permitan recuperar plata y otros bienes producto de las irregularidades mencionadas en los cuadernos de las coimas, según la resolución del Ministerio de Seguridad a la que accedió TN.com.ar. El Gobierno les pagará hasta el 5% de los bienes que se hallen, con un tope de $ 2 millones.
Según estimaciones de la fiscalía a cargo de Carlos Stornelli, empresarios energéticos y de la construcción vinculados a la obra pública pagaron al menos U$S 60 millones en sobornos para financiar las campañas electorales de Néstor y Cristina Kirchner pero que se habrían quedado con la plata, en el caso que fue revelado a partir de las anotaciones de Oscar Centeno, exchofer de Roberto Baratta y arrepentido en la causa.
El documento del Ministerio aclara que no hay objeciones para ofrecer recompensas a las personas que sin haber intervenido en irregularidades en la causa, aporten datos precisos que ayuden a recuperar plata, divisas o bienes relacionados con la causa que tiene a la expresidenta como la principal involucrada.
La resolución indica que el monto de la recompensa se calculará sobre los fondos o el valor de los bienes recuperados, quedando a criterio del organismo liderado por Patricia Bullrich la determinación del porcentaje que corresponda al aportante de los datos. Se tendrán en cuenta la precisión y la eficacia de la información brindada para tal fin.
Quienes ofrezcan datos al respecto deberán comunicarse al número de acceso rápido 134 del Ministerio de Seguridad. El pago de la recompensa será realizado por este organismo, que preservará la identidad del aportante, indica el documento firmado por Bullrich.
Las revelaciones de Uberti, el primer exfuncionario K arrepentido
Entre los arrepentidos, el primer exfuncionario K en entrar a este programa fue el extitular del Órgano de Control de Concesiones Viales (OCCOVI) Claudio Uberti. Se transformó en “imputado colaborador” y agravó la situación de Cristina Kirchner al afirmar que fue testigo de cómo ella vio los bolsos y valijas repletos de dólares producto de irregularidades. “Néstor y Cristina estaban al tanto de lo que yo hacía”, dijo ante Stornelli.
Además declaró ante la Justicia que participó de varias entregas de plata de “coimas a las empresas de corredores viales” al exsecretario privado de Néstor Kirchner Daniel Muñoz y que uno de los destinos de la plata era el departamento de Uruguay y Juncal, en Recoleta, propiedad de los Kirchner.
Reveló además que en la casa ubicada en Río Gallegos, Santa Cruz, el expresidente instaló bóvedas, y que el exministro K de Planificación fue el encargado de comunicarle que debía generar una “recaudación” ilegal de U$S 150 mil dólares mensuales a las empresas que Uberti controlaba como titular del OCCOVI. Dijo además que Néstor explicó que Cristina estaba construyendo y que necesitaba “plata blanca”.
También habló sobre la violencia que el expresidente ejercía hacia sus allegados. Recordó un episodio que según su testimonio habría ocurrido en Madrid, cuando uno de sus colaboradores se retrasó en llevarle los diarios. Entonces le pidió a su secretario privado que le pegara tres trompadas.