A través de la Comunicación A 6037, la entidad que preside Federico Sturzenegger derogó las normas remanentes que integraban el cepo cambiario que guió a la actividad económica entre fines de octubre de 2011 y que aún estaban vigentes.
Además, el directorio acordó un nuevo ordenamiento con el objetivo de simplificar el mercado de cambios, eliminar requisitos burocráticos y reducir los costos operativos para todos los actores.
Entre las medidas adoptadas se destacan:
1.La eliminación de la obligación de justificar con documentación cada operación de cambio. A partir de ahora toda transacción con divisas en bancos y casas de cambio se procesará automáticamente. “Quien la realice sólo tendrá que especificar, con carácter de declaración jurada, el concepto al que corresponde la operación (atesoramiento, comercio exterior, etc.), entre otros datos básicos”, especificó la autoridad monetaria.
2. La derogación de los topes mensuales para operar, aplicándose en este sentido únicamente las disposiciones que limitan el uso del efectivo como parte de la política antilavado. Con estas simplificaciones desaparecerán los motivos para canalizar operaciones cambiarias por vías alternativas al mercado único y libre de cambios (como el ‘contado con liquidación’), con lo cual el mercado será verdaderamente único y libre.
3. Modificará el nomenclador que detalla los motivos para los cuales se puede comprar o vender moneda extranjera, pasándose de 315 conceptos (muchos de ellos vinculados a regulaciones específicas del control de cambios) a unos 70, de fácil interpretación, siguiendo los criterios que aplican las naciones desarrolladas.
4. Permitirá a la banca por internet y a las casas de cambio elijan libremente el horario para operar.
5. Derogó la Comunicación A 4805 que limitaba la realización de operaciones de derivados con el exterior, negando la cobertura de riesgos a muchas compañías, en especial pymes.
Destaca la autoridad monetaria que “impulsa estas modificaciones con la certeza de que la desburocratización del mercado de cambios ayudará al desarrollo del sector financiero, uno de sus ejes de gestión esenciales, y facilitará todas las actividades productivas vinculadas de una u otra manera a los mercados internacionales”.