Todo sucedió demasiado pronto para Natalie Weber, en apenas seis meses. En abril supo que había perdido su tercer embarazo (ya es madre de Mía, de cuatro, y Rocco, de un año y medio). A esa tristeza le siguió la preocupación cuando encontró “una bolita” en una de sus mamas. El diagnóstico fue alarmante: tumor en su pecho izquierdo. El 18 de agosto la operaron. Y este 13 de septiembre, por fin un respiro: la biopsia arrojó resultados positivos. Aunque debe seguir con ciertos controles, el cáncer quedó atrás.
Y este miércoles 21 la modelo de 28 años -quien está casada con Mauro Zárate, jugador de la Fiorentina de Italia- decidió hacerse un tatuaje que simbolice todo lo vivido, justamente.
Esos trazos simples unifican aquello de que una imagen vale más que mil palabras: ese tatuaje con la palabra “Life” lo simboliza todo para Natalie.
Y casi como un dato curioso, vale mencionar que su tatuador, Roberto López, es el mismo que ha trabajado con Lionel Messi y su mujer, Antonella Roccuzzo.
