El tono por excelencia del verano es un híbrido entre el naranja y el amarillo, un color similar al del mango y que según su nombre técnico se llama indio. Sin embargo, la industria de la moda lo bautizó como Namarillo.
La última edición de la semana de la moda dio la bienvenida a esta tonalidad. Lacoste, Milly, Narciso Rodriguez o Tibi coincidieron en elegir el mismo tipo de naranja en sus diseños. Días después en la alfombra roja de los Emmy, la actriz Mandy Moore cautivó las miradas enfundada en una pieza de Prabal Gurung en esa tonalidad.
“Obsesionada con este color”, escribió la editora de moda Pandora Sykes acompañando una foto plagada de prendas ‘namarillas’ cruzando la pasarela. Fue la primera en poner nombre a este llamativo color que rápidamente invadió las redes sociales bajo el hashtag #yorange (resultado del yellow y orange en inglés).
La asesora de imagen, Laura Malpeli de Jordaan, comentó a Infobae que “el yorange se apoderó de las pasarelas durante la presentación de las colecciones primavera-verano 2017”.
Básicamente, se refiere a la combinación de pigmentos amarillos y naranjas en una misma prenda y surgió para poner fin al debate sobre si esa prenda era en verdad amarilla o naranja.
Desde las actrices más cool de Hollywood pasando por las pasarelas más importantes del mundo, hasta el la moda urbana callejera, adoptaron esta nueva tendencia, ideal para lucir en el verano.
Cómo adaptarlo al guardarropas
Looks monocromáticos: es una tonalidad que tiene vida propia, al igual que lo hicieron las famosas en la gala de los Emmys o Ariana Grande durante su presentación en los premios MTV, es fácil de adapatar a vestidos y monoprendas.
Combinarlo con tonos neutros: “Es fundamental tener en cuenta que estamos ante una tonalidad llamativa y será mejor optar por tonos básicos que no compitan por el protagonismo”, explicó Malpeli de Jordaan.
La gama de los nude, beige, blanco, negro, visón y gris pardo son buenas opciones, así como, en un atuendo más informal, combinar el namarillo con denim.
Una tonalidad para las rubias doradas o de tez cálida: al tener dentro de la mezcla al naranja, el ‘namarillo’ no funcionará para llevar solo cerca del rostro en todos los casos y esto se debe a la colorimetría.
Las pelirrojas y aquellas con cabello rubio dorado se verán bien con el namarillo. Por el contrario, las personas de cabello rubio ceniza, platinado y las de cabello oscuro de base fría, como el castaño negruzco, “no se verán tan beneficiadas con el namarillo”, puntualizó la especialista
Para las pelirrojas: si es cerca del rostro, combinado con otro tono que las favorezca o bien alejado de la cara, en detalles como cinturones, calzado, carteras, pulseras o prendas inferiores como una falda.
También hay que considerar la psicología del color: “Estamos ante la combinación de dos colores totalmente dinámicos que se utilizan en ámbitos más creativos, flexibles y desestructurados, por lo que no será la mejor opción incorporar la tendencia del namarillo (especialmente en gran parte del atuendo)”.