La adolescente de 15 años que el jueves último se disparó en la cabeza, durante una clase en el Colegio Nacional “Rafael Hernández” de La Plata, murió después de permanecer internada en terapia intensiva hace cuatro días en el Hospital San Martín.
El juez federal de La Plata, Ernesto Kreplak, comenzará esta semana a tomar declaración testimonial a los compañeros y docentes de la alumna, luego de una serie de peritajes informáticos y de recolección de pruebas.
Fuentes judiciales indicaron que la Justicia logró determinar que el arma con que la menor intentó quitarse la vida, un revólver calibre 38, estaba registrada a nombre de una fallecida exjueza de menores platense, abuela de la joven.
Expertos informáticos de la DDI La Plata realizan peritajes sobre el teléfono de la adolescente y analizan sus posteos e interacciones en distintas redes sociales con el objetivo de determinar una posible instigación al suicidio.
El intento de suicidio de la joven fue el jueves pasado cuando cursaba una clase de Geografía en el segundo piso del tradicional establecimiento educativo. “En un momento, sacó un revólver calibre 38 de su mochila y se disparó en la boca, lo que le ocasionó un orificio de salida en el parietal derecho”, informaron desde la policía. Además, agregaron que “se disparó luego de que sonara la alarma de su celular a modo de recordatorio”.
Inmediatamente, una ambulancia del SAME la trasladó al hospital San Martín, donde fue sometida a una cirugía. Si bien esa cirugía tuvo un buen resultado, en el primer control se detectó que había una hemorragia, por lo que esa misma tarde fue sometida a otra intervención quirúrgica.
“Chau mierdas. Dejo un juego en la mochila, el que lo encuentre se lo queda”, dejó escrito la menor en el pupitre antes de sacar de sacar el arma.
