En el último feriado, del lunes, posadeños y turistas llegados de otras provincias pasaron en masa el Puente Internacional San Roque González de Santa Cruz. Se generaron largas filas con esperas que oscilaron las seis horas para el regreso. Hasta la madrugada de ayer, quedaron los más rezagados para lograr realizar el ingreso al país.
Migraciones informó a El Territorio que, durante todo el feriado, 132.030 personas pasaron la frontera en vehículos particulares, colectivos y en tren. Un movimiento que se equiparó a la fiebre de compras que se vivió en vacaciones de invierno.
Sólo el lunes ingresaron y egresaron del país 47.700 personas por el puente y por tren 6.200. Incluso este último medio de transporte colapsó debido a la demanda y muchos que quedaron sin pasaje debieron volver en el ómnibus internacional abarrotado de gente y paquetes.
Con este panorama de intenso tránsito fronterizo, uno de los sectores ampliamente beneficiados fue el de los mototaxis paraguayos, un medio de transporte irregular que cuesta entre 40 a 50 pesos y cuyo atractivo es la velocidad con que se mueve de una cabecera a la otra, adelantándose a contramano a todos los vehículos que aguardan su turno.
En una y otra orilla, mucho se debatió sobre la necesidad de poner límite a este peligroso servicio y darle un marco normativo, ya que no se lo puede combatir. Más aún, luego de la muerte en colisión de un pasajero argentino que se movilizaba en este servicio en junio pasado y, más recientemente, el accidente que hirió a una pasera paraguaya que caminaba por el viaducto y fue arrollada por una motocicleta, aunque esta vez de patente argentina.
Reducir el número de móviles
Hace unos diez días, ingresó a la Junta Municipal un proyecto de ordenanza para regular la actividad de los mototaxis, que entre otros puntos fija un cupo de 150 licencias municipales, la obligatoriedad de mostrar una oblea con número de vehículo y datos del conductor, impone el límite de un acompañante por moto y además, se establece que la comuna será el órgano de aplicación de la ley y tendrá injerencia en asuntos como fijar el precio del pasaje y controlar que los conductores tengan las motocicletas en buen estado y con los elementos obligatorios como casco, chaleco reflectante y seguro para el conductor y para el pasajero.
Miguel Ángel Viveros, director de Tránsito de Encarnación, en conversación con El Territorio, detalló que fue parte de la comisión que elaboró el proyecto de ordenanza. “Vimos la actividad ilegal de los mototaxis como un problema creciente y que genera riesgo vial y que puede costar una vida, como de hecho pasó hace poco en un accidente en el puente”.
Sostuvo que, con el objetivo de ordenar la actividad de los mototaxis, “presentamos hace unos diez días a la Junta Municipal un proyecto que pone un cupo a los mototaxis, que hoy no tienen ningún tipo de legalidad. Avanzamos en varios puntos, pero la cuestión del seguro para el acompañante es algo que todavía no estamos pudiendo resolver”.
El funcionario se mostró optimista en que la normativa pueda aprobarse durante septiembre y que para octubre pueda estar ya en vigencia.
“Se necesita regular con urgencia el accionar de los mototaxis que realizan maniobras peligrosas para ellos y para terceros y además cobran un dinero que no está regulado, es una actividad totalmente informal”.
Este último fin de semana, ediles de la comisión de tránsito de Encarnación realizaron la inspección del movimiento en el circuito comercial para marcar las posibles paradas.
El último relevamiento de la Junta Municipal señala que están en servicio casi 200 motocicletas que realizan entre diez a 20 cruces diarios y que se eleva en días de mucho tráfico. La comuna reducirá el número de estos transportes a 150, según adelantó Viveros.
Por otra parte, Roxana Velázquez, delegada de la Dirección Nacional de Migraciones sede Posadas señaló que “los números que tuvimos fueron similares a los registrados durante el receso invernal, no podemos hablar de un récord, pero sí de un movimiento intenso. Para atender al gran movimiento de personas la Dirección trabajó con todo el personal cubriendo todos los controles, todas las casillas trabajaron a pleno”.
Durante la jornada del lunes y sobre todo ayer fueron muchas las quejas por las largas colas para trasponer el puente.
Viveros precisó que del lado encarnaceno se formó hacia la tarde noche una cola de diez kilómetros y trabajaron diez agentes.