En Japón lo catalogan como un milagro. Casi una semana después, el niño de 7 años que había sido abandonando en un bosque donde abundan los osos pardos fue encontrado con vida.
Yamato Tanooka sobrevivió porque se refugió en una pequeña cabaña deshabitada. Allí encontró agua y mantas para abrigarse, aunque no comida. Los médicos lo encontraron en buen estado, apenas con unos rasguños y una deshidratación leve.
El sábado pasado, luego de un día al aire libre, los Tanooka bajaron a su hijo del auto y lo dejaron en un camino boscoso cerca de Nanae, en la región de Hokkaido, en reprimenda porque se había portado mal durante la tarde, arrojándole piedras a los vehículos y a la gente. Cinco minutos después volvieron a buscarlo y ya no lo encontraron.
En un primer momento los padres dijeron que el niño se había perdido mientras recogía vegetales silvestres junto a su hermana, aunque enseguida tuvieron que admitir la verdad. Más de 180 personas participaron de su búsqueda.
Un soldado fue el que encontró este viernes al niño en una cabaña abandonada de una base militar, a unos 5,5 kilómetros de donde había sido visto por última vez. “Bebía agua para sobrevivir. No había nada que comer”, contó el niño, que no derramó ni una sola lágrima y comió con avidez el arroz que le compartió el soldado.
La zona es hábitat de osos pardos que pueden tener una estatura de hasta 2 metros. Pero estos no fueron necesariamente una amenaza.”Los osos suelen mantenerse entre ellos mismos, así que en realidad es mejor hacer más ruido para que estén conscientes de la presencia humana, lo que los hace alejarse”, indicó Ross Findlay, fundador del Centro de Aventuras Niseko, a BBC.
“Le dije que sentía haberle causado tanto dolor”, dijo el padre, cuando se le preguntó qué había dicho a su hijo después de reunirse con él.
