En los años 90, una mujer que no quería tener sexo le podría haber dicho a su pareja “esta noche no, mi amor, que me duele la cabeza”. En el siglo XXI, esta misma escena sería más bien “hoy no mi amor, que dan un nuevo capítulo de Game of Thrones”. No lo podés negar, pero hay tantos buenos programas y series en la tele y Netflix que es difícil resistirse, un fenómeno que se conoce como binge-watching.
Y justamente, un estudio alerta sobre el riesgo de esta práctica sobre nuestra vida sexual. El trabajo fue realizado por la Universidad de Cambridge, en el Reino Unido, y sostiene que en no más de 15 años (hacia 2030), las series de televisión van a reemplazar el sexo en nuestra vida cotidiana.
Para demostrarlo, el estudio se basó en una encuesta que muestra que en los ’90, las parejas tenían sexo 5 veces por mes en promedio, contra 3 veces en 2010, es decir una caída del 40%. ¿Cómo se explica esto? En los 90, los buenos programas terminaban a las 22:30, lo que dejaba un rato para hacerlo antes de irse a dormir. Pero hoy, con los smartphones, los DVD y Netflix, podés pasarte la noche entera viendo series sin aburrirte ni un minuto. ¿Es mejor la tele que un orgasmo? La respuesta, en 2030.