“Ropa negra y una vela encedida para pedir por la vida”. Bajo esta consigna, la sociedad mendocina organizó una nueva marcha para exigir justicia por Claudia Arias, Marta Susana Ortíz y Silda Vicenta Díaz, las tres mujeres asesinadas en Godoy Cruz. Vecinos convocaron por redes sociales a caminar hacia la Legislatura de la ciudad de Mendoza en reclamo de políticas que frenen los femicidios.
El triple homicidio conmocionó a la provincia. Las mujeres murieron apuñaladas mientras dormían en una casa del barrio Trapiche, de la ciudad de Godoy Cruz. Tras el violento episodio, también resultaron heridos una bebé de 10 meses y un nene de 11 años que todavía están internados en estado grave. Un tercer chiquito, de 8 años, logró escaparse de la escena del crimen y se salvó porque se escondió en el baúl de un auto.
Por la masacre está imputado Daniel Salazar, un profesor de artes marciales de 30 años que era pareja de Claudia Arias. Este lunes se supo que, en el momento del ataque, el presunto asesino y su expareja discutían por el ADN de la beba, que sería hija de ambos. Lo contó el hijo de la víctima que logró escapar del triple homicidio en su declaración ante la Justicia.
Además, los investigadores encontraron un cuchillo y ropa ensangrentada a metros de la casa de Zalazar. Estaban envueltos en una bolsa de nylon al lado de un contenedor.
Todo indica que el presunto femicida habría descartado todos estos elementos cuando intentó huir de la masacre que dejó en la casa del barrio Trapiche. Zalazar se acercó al Hospital Central luego del ataque y le aseguró a los médicos que había sido víctima de un robo para que le curaran las heridas que tenía en un brazo. Finalmente, la Policía lo detuvo en el centro de salud.
