“Tuve momentos altos y bajos pero siempre tratando de volver a lo que más quería hacer que era jugar el básquet”, comentó Carlos Delfino. De hecho, el alero que se operó 7 veces tras fracturarse el escafoide del pie, confesó que de momento pensó en olvidarse de todo.
Sin embargo, decidió seguir intentándolo contra viento y marea. “Si te seguis operando te vas a quedar rengo y sin hueso”, le decían algunos médicos. Pero nada le importó, y al día de hoy, el jugador de 33 años todavía sueña no solo con volver a las canchas, sino también con ganarse un lugar entre los 12 que viajarán a Río para representar a la Selección.
De cualquier manera, su presencia en el que sería su cuarto Juego Olímpico (Atenas 2004, Beijing 2008 y Londres 2012), dependerá de que se pueda mostrar a la par del grupo que dirige Sergio Hernández. “Si vemos que no llego al nivel del equipo voy a ser el primero en dar un paso al costado”, aseguró.
Además, el Lancha, que ya había expresado tener una mezcla de emociones terribles, se mostró contento de reencontrase con Manu Ginóbili, Luis Scola y Andrés Nocioni. “Es lindo encontrarse con caras conocidas, formar parte de esto”, .