Lázaro Báez tiene mucho para decir. Después de acusar a la expresidenta de haberlo “usado de forro” para desligarse de posibles maniobras de corrupción ahora advirtió que lo amenazan para que no hable más, después de romper el silencio. “Cada uno deberá justificar lo que hizo”, fue uno de los mensajes que dio el exhombre fuerte de la obra pública patagónica.
El empresario K está detenido desde el pasado 5 de abril, procesado por lavado de dinero en la causa de “La Ruta del dinero K”. Desde el penal de Ezeiza -donde está alojado- volvió a apuntar contra Cristina Kirchner: dijo que no debería ser “intocable” para la Justicia si “existe la intencionalidad de investigar las cosas como corresponde”.
La sola posibilidad de ver a sus hijos presos inquieta a Báez. Todos ellos son investigados a partir de un informe de la UIF que sostiene que son beneficiarios de una cuenta en Suiza por 25 millones de dólares, además de que Martín está procesado por lavado de dinero, al igual que su padre. “Mis hijos no tienen nada que ver, en realidad me están apretando para que me calle, para que no siga hablando”, advirtió.
Además ratificó sus críticas contra el juez federal Sebastián Casanello, que está a cargo de la causa por lavado de dinero. Báez ratificó que vio al magistrado en la Quinta de Olivos, en un nuevo intento para sumar fichas en la recusación del juez, que debe ser resuelta por la Sala II de la Cámara Federal porteña. “Yo lo vi, no me lo contó nadie”, insitsió el empresario, que ya había ratificado esta versión ante la Justicia.
Leandro Báez -el menor de los hijos del empresario- hizo presentaciones para tratar de apartar al magistrado, bajo las acusaciones que no es imparcial y de que no busca investigar a Cristina. La propia Cámara que debe resolver sobre la continuidad de Casanello le había ordenado al juez, con un duro fallo, que pusiera la lupa en el poder.
Frente a este escenario, el periodista Luis Gasulla de Infobae le preguntó si la expresidenta era una “intocable” en la Justicia. “No sé, eso depende de la intencionalidad que tenga cada uno de investigar las cosas como corresponden. Si tienen ganas de hacer las cosas bien, nadie es intocable”, dijo Báez. “Cada uno deberá defender y justificar las cosas que hizo en la manera que corresponde y dentro de los parámetros de la ley”, avisó.
Báez negó que tenga un pacto de silencio con la exmandataria. “Soy el único que dice: ‘hay que investigar la obra pública’. ¿Usted cree que yo tengo pacto de impunidad al pedir esto? No. Evidentemente que hay gente en la justicia que no quieren que esto suceda. O tienen acuerdo tácito predeterminado en dónde tiene que morir esta investigación”, aseguró.