Lo confirmó el Ministro de Gobierno Marcelo Pérez tras una reunión celebrada ayer con los representantes de los trabajadores al volante y el jefe de la Policía provincial. Es el primer paso de una serie de medidas que se pondrán en marcha para brindar más seguridad a los taxistas y los usuarios.
Carlos Alberto Amarilla (62), taxista de profesión, murió el viernes por la noche mientras prestaba servicio en la terminal de Posadas. Lo asesinaron y por el hecho la policía detuvo a un hombre de 17 años.
“Estamos muy consternados por el hecho y en primer término expresamos nuestra solidaridad y condolencias a la familia de la víctima. Ayer a las 17 horas recibí a representantes de los trabajadores del volante, junto al jefe de la policía. Se acordaron una serie de iniciativas a pulir para aportar mayor seguridad”.
Además el funcionario aseguró que se harán más controles de forma estricta tanto para los choferes como los pasajeros. “En el control muchas veces al taxi que está trabajando se los deja pasar o no se identifica al pasajero o se lo hace de manera más liviana. Acordamos una línea de trabajo más estricta acompañado de una serie de medidas para canalizar, algunas no pasan por el Ministerio de Gobierno”.
Asimismo respecto a un pedido o sugerencia desde el sindicato de taxistas que habían identificar a los pasajeros exigiendo su documento de identidad, dijo que no había ningún problema en hacerlo porque cuando se viaja en avión o en micro, se hace.
