El jefe de Gabinete Marcos Peña y la gobernadora bonaerense María Eugenia Vidal, dos de los funcionarios de mayor confianza de Mauricio Macri, fueron los encargados abrir el “retiro espiritual” convocado por el Presidente, a casi un año de su asunción en el Ejecutivo nacional.
“Este año tuvo mucho que ver con la emergencia y la transición. Nos parece importante poder dejar en claro cuáles son las prioridades y el camino”, dijo Peña en conferencia de prensa en la inauguración de la reunión, de la que participan el mandatario y 34 funcionarios.
Acompañado por Vidal, el jefe de Gabinete se mostró confiado en que la economía se recuperará en el 2017. “El año próximo la Argentina va a crecer, se va a recuperar el salario real. No es un camino de un día para el otro pero vamos a tener un buen 2017”, dijo el funcionario.
Peña no dejó de referirse a uno de los temas que más hizo ruido en el interior de Cambiemos, las fuertes declaraciones del presidente de la Cámara de Diputados, el oficialista Emilio Monzó, que participa del retiro.
Luego que el legislador llamara a convocar a dirigentes del PJ y cuestionara al asesor ecuatoriano estrella de Macri, Jaime Durán Barba, el funcionario dijo que “nunca estuvo en duda” la participación del legislador en el encuentro y que las diferencias “no son tan dramáticas como podrían parecer”.
En esta línea Vidal, que fue calificada por Peña como la “anfitriona” del encuentro por desarrollarse en la provincia de Buenos Aires, coincidió en calificar con un “8” a Macri, tal como el propio mandatario se había autocalificado en una entrevista con La Capital de Rosario.
“Estoy convencida de que es una buena calificación, y no es un 10 porque por supuesto todavía falta mucho. Pero nadie duda de que el año que viene la Argentina va a crecer”, dijo la gobernadora, que participará en la cena en el predio perteneciente al Ejecutivo pero no de las reuniones de trabajo, que se extenderán hasta el sábado al mediodía.
En el encuentro se definirán las 100 prioridades del Gobierno, de cara a las elecciones legislativas de 2017, y se tratarán temas de diversas temáticas: social, económica e institucional. El Presidente evaluará a sus ministros, que deberán exponer sobre su gestión, sobre lo que les quedó por hacer y sus próximas políticas.
Esta nueva edición del “retiro espiritual”, un clásico del PRO, se desarrolla en medio de las tensiones internas por los cuestionamientos públicos de Monzó a Cambiemos y de una intensa agenda parlamentaria en sesiones extraordinarias, que tiene a los cambios en el Impuesto a las Ganancias como uno de los proyectos más sensibles en discusión. El debate de esta iniciativa será una de las claves de la reunión.