Manos Agrietadas: Recetas para Suavizarlas

Durante la época de invierno, es común tener nuestras manos agrietadas debido al clima seco y frío, no obstante, no es la única época en las que nuestras manos sufren. Las tareas diarias, la manipulación de productos de limpieza, o incluso el clima caluroso y seco durante el verano pueden provocar que la piel de nuestras manos se reseque y agriete.

Tener la piel reseca y agrietada no sólo da un mal aspecto a nuestras manos, también es bastante incómodo y además puede lastimarse con más facilidad.

Recomendaciones generales

Cuidar de nuestras manos puede ser sencillo sobre todo si las protegemos de los agentes que maltratan y resecan nuestra piel.

Humecta tu piel diariamente utilizando cremas apropiadas.

Antes de realizar labores de limpieza es recomendable utilizar guantes protectores.

En época de frío, emplear guantes para cubrir nuestras manos cuando salimos puede ser útil para evitar la resequedad por el frio.

Remedios para manos agrietadas

Para conservar la hidratación en la piel de tus manos a veces requiere más que sólo la aplicación de crema humectante, especialmente cuando queremos solucionar el problema con rapidez y eficazmente.

Los aceites vegetales son buenos ingredientes para estas recetas, pues mejoran y favorecen la humectación de la piel.

Aceite de Almendras

Uno de los aceites más empleados en el campo de la cosmética es el aceite de almendras, este comúnmente se utiliza para hidratar o incluso como desmaquillante natural, sin embargo, también es un excelente humectante de las manos resecas.

Para aprovechar sus beneficios hay que aplicar algunas gotas en nuestras manos y frotar para esparcir. La constancia es igualmente muy importante, se recomienda repetir dos veces al día.

El aceite de almendras no deja una sensación grasosa, por lo que es fácil de utilizar en cualquier momento, no obstante se recomienda evitar utilizar demasiada cantidad cada vez.

Aceite de oliva

Es verdad que muchos aceites vegetales pueden combatir la resequedad, pero en el caso del aceite de oliva, puede que su función vaya más allá.

El aceite de oliva se puede utilizar para cubrir nuestras manos antes de manipular químicos o jabones detergentes para tareas como la de lavar ropa o manos, de esta forma evitamos que nuestras manos se resequen.

La sensación al aplicar el aceite de oliva puede ser un poco grasosa, sin embargo, esta característica precisamente nos ayuda a proteger nuestra piel durante el contacto con estas sustancias.

Exfoliante con azúcar

Cuando exfoliamos nuestras manos, también eliminamos células muertas e impurezas, de tal forma que nuestra piel luce radiante y más flexible.

Un remedio casero para exfoliar la piel, consiste en el empleo de azúcar, mezcla una cucharada de aceite vegetal, con azúcar para formar una pasta, la consistencia debe ser similar a la de una crema, aunque se apreciarán los cristales de azúcar.

Aplica la mezcla en tus manos y frota gentilmente distribuyéndola, no se debe frotar de forma vigorosa. Lava bien con agua templada y deja secar, notarás tus manos mucho más suaves desde la primera aplicación. Se recomienda repetir esta tarea de una a dos veces a la semana.

Manteca de cacao

Un remedio muy rápido y eficaz contra la sequedad de las manos, es la manteca de cacao, su alto poder hidratante es ideal para suavizar manos ásperas y agrietadas.

Antes de dormir, toma un poco de manteca de cacao con tus manos y espárcela, hasta obtener una capa alrededor de estas, posteriormente, cubre tus manos con unos guantes de algodón y deja actuar durante toda la noche, a la mañana siguiente, ¡notarás los increíbles resultados!

Refresca tus manos con leche

No es una sorpresa que la leche sea un remedio para mantener unas manos suaves, teniendo en consideración que Cleopatra, solía bañarse en leche para cuidar de su piel.

Si tus manos han sido afectadas por el sol y la sequedad, coloca leche en un recipiente en donde puedas recargar tus manos, añade el zumo de un limón chico y sumerge tus manos por al menos 15 minutos, dejando que la leche actúe.

El resultado serán unas manos más suaves y también más luminosas, ya que este remedio sirve para aclarar la piel gradualmente, además de hidratar. Se recomienda repetir 2 veces a la semana para mejores resultados.

Manos suaves con yogurt

No sólo la leche es beneficiosa con la piel, el yogurt es un lácteo que también podemos aprovechar para suavizar nuestra piel de una sencilla forma, gracias a que es hidratante.

Mezcla un par de cucharadas de yogurt natural con una cucharada de miel, y el resultado, se debe untar en las manos como crema, dejando secar, alrededor de 10 a 20 minutos, después, enjuagamos con agua templada. Se recomienda aplicar diariamente.

Si quieres obtener una hidratación extra con esta receta, se sugiere añadir una cápsula de vitamina E a la mezcla.