El fútbol argentino está en su peor momento. Los clubes le deben dinero a futbolistas y empleados, la AFA está sumergida en una constante lucha de poderes y hoy ni siquiera se sabe si el torneo se reanudará el próximo 5 de febrero porque aún no se llegó a un acuerdo con ninguna empresa para que televise el campeonato.
Y Mauricio Macri fue contundente con respecto a la actualidad del deporte más importante del país: “Ya lo dije antes y lo digo hoy de nuevo. El fútbol está en una crisis terminal. Los dirigentes en vez de encarar el tema, siguen tratando de encontar un atajo. No toman las cosas con seriedad”.
El presidente, en conferencia de prensa, disparó: “El Estado no va a participar más del Fútbol para Todos”.
Espero que la AFA y los clubes abandonen la oscuridad y se transformen en situaciones transparentes y confiables
Macri le apuntó a los dirigentes: “Hace seis meses que tienen claro que el FPT no sigue, así que espero que hayan previsto cómo van a seguir. Los clubes tienen que pagar impuestos, deben cumplir sus obligaciones y trabajar para que los estadios sean más seguros”. La realidad es que hoy el fútbol argentino está más cerca de estancarse que de continuar.