Aníbal Fernández renunció a la Confederación Argentina de Hockey por motivos puramente políticos. Desde lo deportivo, su gestión, iniciada en 2013, fue una cadena de logros: los Leones quedaron terceros en el mundial de Holanda 2014 y las Leonas se alzaron con la Champions Trophy en 2014 y en 2016. Fue la pérdida de poder en el Gobierno sumada a las sospechas por corrupción lo que truncó su dirigencia en el juego del palo y la bocha.
Para el ex jefe de Gabinete, la gestión de Cambiemos ejerció sobre él una “persecución” comandada por “profetas del odio” que “manosearon” la institución del hockey. Es largo, sin embargo, el listado de factores que ensombrecieron su dirigencia en la CAH. Las causas judiciales, la pérdida del principal sponsor, los escraches públicos y las sospechas que rodearon su figura en los últimos días hicieron recrudecer el malestar en las jugadoras de la selección y derivaron en su salida.
El primer traspié de este año se dio por el famoso contrato de las “canchas fantasmas”. LA NACION reveló en mayo de este año que como presidente del hockey y como funcionario kirchnerista, Aníbal Fernández estuvo virtualmente parado de los dos lados del mostrador. Fue el 26 de febrero de 2015, cuando la CAH recibió $ 56 millones de fondos públicos de la Jefatura de Gabinete y apenas unas horas después el quilmeño quedó al frente de esa cartera.
El objetivo del convenio era “instalar canchas de césped sintético para hockey en cada provincia del país” y la cartera coordinadora de ministros otorgaba un monto no reintegrable de $ 56 millones en cinco cuotas mensuales consecutivas. Aunque se acordaron hacer 46 canchas, para mediados de este año sólo habían sido instaladas cinco.
Aníbal Fernández señaló que al momento de la firma del contrato se había tomado una licencia de la CAH para evitar incompatibilidades. Sin embargo, el texto del acuerdo del 26 de febrero de 2015 llevaba su nombre en mayúsculas en el encabezado. Ese accionar le valió una denuncia de la Oficina Anticorrupción en la justicia federal, que imputó a Fernández y ordenó un allanamiento a la Confederación de Hockey.
Otro factor clave que empujó la salida: el nuevo Gobierno suspendió el millonario sponsoreo al hockey y lo hizo por el rol de Aníbal Fernández. Bajo el lema “Argentina, un país con buena gente”, desde el 2012 la gestión anterior se había comprometido a colocar propaganda por más de 2 millones de dólares. Cuando Aníbal Fernández ganó la presidencia de la CAH, en 2013, obtuvo importantes mejoras en los términos de ese convenio. Y durante 2015, cuando volvió a la cúpula del Gobierno como jefe de Gabinete, fue él mismo quien autorizó esas partidas millonarias. Todo eso terminó con el gobierno de Mauricio Macri, que consideró que habían existido irregularidades con el ex jefe de Gabinete y titular de la CAH.
La actual gestión encontró que la última factura de la CAH por el sponsoreo estaba impaga y que le faltaba la certificación correspondiente, a pesar de que en los partidos Presidencia se había hecho presente con propaganda en todo el perímetro de las canchas. El actual jefe de Gabinete, Marcos Peña resolvió dejar sin efecto esa factura y, el 12 de mayo, dio baja el contrato de sponsoreo, pautado hasta 2018.
Otro problema se sumó desde lo judicial en los últimos días. El nombre de Aníbal Fernández volvió a quedar bajo un manto de sombras tras la detención de Ibar Pérez Corradi en Paraguay. En un audio difundido el fin de semana, el hombre señalado como el autor intelectual del Triple Crimen ligó al ex jefe de Gabinete con el tráfico de la efedrina. Y hoy llegó al país con la promesa de decir más ante la Justicia. El ex jefe de gabinete debió dar explicaciones del caso en Londres, mientras acompañaba a las jugadoras en la última Champions Trophy. Su oscuro panorama político contrastó así con la conquista deportiva, que convirtió a las Leonas en el seleccionado más ganador en este certamen.
Además de los factores políticos (o por ellos) Aníbal Fernández sumó el desplante público de las Leonas. Al malestar que ya habían manifestado varias jugadoras históricas, se sumó el duro tuit de Charo Luchetti, en el que manifestaba: “Todos somos responsables de que Aníbal Fernández esté así como si nada ¿Cuánto más vamos a bancar a esta gente en el hockey argentino?”. Luchetti ya había criticado a Fernández en otras oportunidades y había dejado el seleccionado en 2014, con cuestionamientos al ex titular de la CAH.
Un último factor político sumó a la salida de Fernández. Mientras el ex jefe de Gabinete denunciaba que Cambiemos ejerce “una democracia de pacotilla” y hablaba de un “manoseo” a la institución del hockey, una imagen dijo más que mil palabras. La semana pasada, las Leonas se mostraron sonrientes y agradecidas para una foto oficial. En el medio del equipo las abrazaba Mauricio Macri. En la misma cita, Juliana Awada fue bautizada por las jugadoras como una Leona más.