YPF, que tiene un 55% de participación de mercado en los surtidores, es el que debe mover las fichas para que los demás (Shell, Axion, Petrobras, Oil,Refinor) la sigan.
“En caso que no lo hagan a la medianoche, será durante el día (de mañana miércoles), pero el jueves vamos a tener nuevos precios”, comentan en las estaciones de servicio.
El litro de nafta súper, que se despacha a $ 17,08 en las estaciones de YPFen la ciudad de Buenos Aires, trepará por arriba de los $18,40. En el caso del combustible “premium”, que está a $ 19,30, el calculo de los estacioneros es que se elevará a $ 20,85.
El aumento en los combustibles llega en contra de las recomendaciones del Banco Central y el saliente ministro de Economía. Alfonso Prat Gay, que lo veían como un elemento que generaría inflación en el arranque del año, cuando el Gobierno está buscando contener el alza del costo de vida.
“Si yo les preguntó a ustedes cuál fue el aumento promedio de los precios de la economía de este año, todos van a decir un valor que esté cerca de 37%,40%,42%, mientras que los combustibles aumentaron un 31% en el año. O sea, que este año, (combustibles) tuvo un aumento negativo con respecto a los precios de la industria”, dijo Aranguren en una exposición reciente para especialistas agropecuarios. “Creo que también que en 2017, el aumento de los combustibles, dependiendo de las expectativas que tenemos de precios internacionales y evolución del tipo de cambio, va a estar debajo del valor de este año”, puntualizó en esa disertación.
El precio promedio de nafta en el mundo es de US$ 1. En la Argentina, quedará cerca de US$ 1,15 tras el próximo aumento. Los expertos locales se enojan con esa comparación. Dicen que la carga impositiva local (más del 41% en la nafta premium, por ejemplo) distorsiona la comparación internacional.