No sólo la consideran un ofensa a Alá y un acto contra la naturaleza. Sino que, además, la penan con la muerte. Y esta sentencia, por lo general, se aplica de una manera brutal: por lapidación. Es la ley contra los homosexuales en la mayoría de los países regidos por el islam. O en aquellos donde milicias fundamentalistas controlan gran parte de su territorio, como es el caso de Nigeria -no estrictamente musulmán-, o Siria e Irak, donde el Estado Islámico mantiene ciudades bajo su dominio, sin intervención de un gobierno central.
Para los clérigos más severos de esta religión -chiitas o sunitas-este tipo de prácticas debe ser castigado con la pena máxima. Así también lo creyó Omar Saddiqui Mateen cuando irrumpió en el club nocturno Pulse, en Orlando, donde acribilló a 49 personas.
Afganistán
De acuerdo con el reporte anual de 2015 de la Asociación Internacional de Lesbianas, Gays, Bisexuales, Trans e Intersexuales (ILGA, por sus siglas en inglés), en este país existen las leyes que condenan con pena de muerte, pero rara vez se aplican.
Arabia Saudita
Todo el sexo fuera del matrimonio es ilegal. Y las leyes ultraislámicas que se aplican en este país indican que la lapidación es la forma de penar a aquellos que mantengan sexo con personas del mismo género.
Brunei
Este año, el gobierno central tiene pensado instaurar la pena de muerte por lapidación contra aquellos que cometan el “delito” de participar de actos sexuales con personas del mismo género.
Irán
Las relaciones entre hombres puede ser castigada hasta la muerte. Pueden ser azotados por sólo darse un beso. Igualmente con las mujeres.
Irak
La ley penal no prohíbe expresamente los actos homosexuales, pero se aplica de hecho. En las comunidades donde la vida se rige según la sharia, las milicias y los tribunales islámicos condenan con la muerte a los homosexuales.
Mauritania
Una ley de 1984 establece que dos hombres que fueran sorprendidos manteniendo sexo serán apedreados hasta la muerte. Las mujeres son encarceladas.
Nigeria
El gobierno central lo considera un delito y lo pena con la prisión. Pero en las regiones controladas por grupos fundamentalistas, la pena es la muerte. Esto ocurre, sobre todo, en la región norte del país, donde la sharia se aplica de manera brutal.
Pakistán
Mismo caso que Afganistán. Las leyes contemplan la muerte para los homosexuales, pero no se aplica regularmente.
Qatar
No sólo la homosexualidad se paga con la muerte: también las relaciones extramatrimoniales. Existen las leyes, pero rara vez la condena llega a semejante instancia.
Siria
En algunas ciudades donde el Estado Islámico rige las vidas de las personas, se ejecuta a aquellos que realicen prácticas homosexuales. Las leyes federales sólo lo consideran un acto ilegal.
Somalia
El código penal estipula la prisión, pero en algunas regiones los tribunales islámicos establecen la sharia y la pena de muerte contra los “sodomitas”.
Sudán
Si una persona es condenada por primera vez por ser homosexual, se lo azota con látigo. Una segunda vez, merece la prisión. Pero una tercera ya es causa de muerte.
Yemen
Un hombre casado puede ser sentenciado con la pena de muerte si es encontrado culpable por homosexual. Si no está casado, será blanco de latigazos o un año en prisión. Las mujeres serán detenidas durante siete años.