Llevó a su perro a una peluquería canina, pero no volvió a buscarlo por un cruel motivo

Un joven fue al negocio con su mascota para que le cortaran el pelo y dijo que volvería más tarde. Los empleados del lugar lo esperaron por horas, pero nunca regresó. Tras hacer una campaña en las redes para hallar al dueño, descubrieron por qué lo hizo.

Un increíble suceso de crueldad hacia los animales se conoció en los últimos días. Un perro llamado “Rulo” fue abandonado en una peluquería canina por el ex novio de su dueña. El sujeto les dio datos falsos a los empleados del lugar y dijo que iba a regresar, pero nunca lo hizo.

El hecho sucedió el pasado 5 de mayo en un pet shop ubicado en el barrio porteño de Villa Devoto. Un joven fue hasta local con el cachorro para que lo bañaran y le corten el pelo. Les avisó a las empleadas que iba volver cuando terminara el servicio, pero lo esperaron hasta el horario de cierre del lugar y jamás apareció.

La peluquera intentó contactarlo con los datos que había dejado, pero descubrió que eran falsos. Es por eso que decidió llevarse al caniche a su casa, y a través de las redes sociales difundió su foto y dio detalles de dónde había sido abandonado.

 

 

“El cachorro ya estaba listo y él no llegaba. No sabíamos si le había pasado algo, la verdad no teníamos idea. Pasó mucho más tiempo y no teníamos respuestas. Comenzamos a preocuparnos aún más”, relató Vanina.

La historia se viralizó y tuvo un final feliz, en principio. Al día siguiente que hizo la publicación en la cuenta de Facebook de la peluquería canina, recibió el mensaje de una joven que había visto el posteo y se identificó como la dueña del perro, que tiene menos de un año.

Unos minutos después la chica se presentó en el local y mostró unas fotos que comprobaban que era su mascota. Al consultarle por el joven que llevó a Rulo al negocio, la dueña les reveló que fue su expareja el que lo abandonó.

 

“Ellos se habían separado hace poco y él no le quería darle el perro y se ve que dijo ‘acá va a tener comida y va a estar limpio’ y lo dejó. Es la primera vez que nos pasa algo así, explicó la empleada del centro.

Por su parte, la trabajadora del pet shop reconoció que la chica se hizo cargo de todos los gastos del baño y el corte de pelo. Incluso destacó que el perro estaba más tranquilo cuando la vio llegar. ”Estaba contento, reaccionó muy bien, la reconoció inmediatamente. Nos dimos cuenta que realmente era la dueña”, sentenció.