Después de años de lucha para que las medidas de la muñeca Barbie no sean promovidas como el estándar de belleza, un nuevo reto viral que arrancó en Japón y se extendió por redes sociales genera preocupación.
Se trata de la ‘dieta Cenicienta’, en la que se desafía a los jóvenes a conseguir las supuestas proporciones que tendría la princesa Disney si fuera una mujer real. Este peligroso régimen obliga a reducir la ingesta de alimentos de manera brusca para lograr la cintura de avispa típica de las protagonistas de cuentos de hadas.
El desafío viral puso en alerta a los nutricionistas quienes consideran que este reto puede incentivar a trastornos en la alimentación. Asimismo, estas dietas son específicamente perjudiciales en adolescentes, porque aún están en edad de crecimiento y tienen necesidades nutricionales específicas.
Para conseguir el peso que tendría la princesa de Disney hay que llevar a cabo un cálculo: elevar al cuadrado la estatura de la persona en metros (por ejemplo 1,55 x 1,55) y el resultado volverlo a multiplicar por 18. La cifra final que se obtiene tras esa fórmula es un índice de masa corporal muy bajo, dado que 18 se ubica por debajo de los estándares recomendados por los médicos.
La jefa de Residentes del Departamento de Alimentación en el Hospital de Clínicas, Micaela Cusato (M.N. 7519), explicó a CONBIENESTAR los peligros de someterse a dietas extremas: “Puede haber una sensación de fatiga crónica. Cuando una dieta es de descenso rápido suele ser baja en nutrientes. Hay mayores probabilidades de tener una lesión muscular”.
“Esa pérdida de masa magra no sirve a nivel metabolismo porque se pierde peso en los músculos y no en la grasa. A lo que es nivel salud no da ningún beneficio y podría perjudicar”, vaticinó al especialista.
