Su regalo de cumpleaños iba a ayudarla a “verse mejor”, pero la dejó en coma diez días y le costó la amputación de la pierna derecha. La mujer, de 31 años, denunció que fue por culpa de una liposucción, que le generó una infección generalizada. La víctima iniciará un juicio por mala praxis al cirujano que la operó, en una clínica privada de Colegiales.
“El único recuerdo que tengo es que cuando me desperté un 4 de julio, tenía un espacio vacío. Me agarró un ataque y llamé a las enfermeras desesperada, no podía creer que me faltaba media pierna”, relató Mariela Ayala. La joven, que vive en el partido de Quilmes, explicó que la intervención original era para remover grasa del abdomen y transferirla a los glúteos. Pero a los dos días, tuvo fiebre y un intenso dolor en la zona lumbar.
Como el malestar no desaparecía, decidió ir de urgencia a la guardia del Hospital Churruca. Por su enorme infección en el cuerpo, los médicos no tuvieron otra opción que amputar desde la altura de la tibia.
En su denuncia, Ayala contó que eligió al doctor Juan Carlos Calvo de Alba porque era el único que encontró con disponibilidad para operarla rápido. “Tuve la entrevista en su consultorio privado, pero la liposucción fue en el Instituto Quirúrgico Láser. Aunque me hizo hacer análisis de sangre y un electrocardiograma un día antes, a los pocos días se me hincharon las piernas”, recordó la mujer.
Cuando ingresó al hospital, el panorama fue desolador. “No había posibilidad de vida, les dijeron a mis padres que me despidieran porque no pasaba la noche, hasta que encontraron un medicamento que alivió la infección”.
Su abogado, Gabriel Van Kemenade, confirmó que iniciaron “una mediación civil sujeta a secreto” contra el cirujano estético porque “no posee una clínica a su nombre, sino que alquila”. Además, el letrado resaltó que también realizarán una denuncia penal por “lesiones gravísimas”, ya que los médicos que le amputaron la pierna diagnosticaron que fue producto de una mala praxis.
Otro de los puntos a investigar será el bajo costo de la liposucción, que fue de 30 mil pesos. “Me dio un recibo por una parte, que fue la que aboné con tarjeta. Pero del saldo en efectivo no tengo comprobante”, indicó Ayala, que después de su dura experiencia está bajo tratamientos psiquiátricos y psicológicos.
TN.com.ar se comunicó con la clínica donde Ayala se hizo la liposucción para obtener la palabra del profesional. Sin embargo, en el lugar no quisieron confirmar si el médico está de vacaciones ni si habrá un comunicado sobre la denuncia de la joven.
