Lázaro rechazó acusaciones y negó una maniobra con títulos públicos

Finalmente no hubo sorpresas. El empresario Lázaro Báez declaró por escrito ante el juez Sebastian Casanello y negó los cargos en su contra. La posibilidad de que se convierta en un nuevo “arrepentido” deberá esperar.

Báez cumplió con el trámite judicial (hoy tenía que ampliar su indagatoria) mediante unescrito de ocho carillas, pudo saberClarín de fuentes judiciales. Además aprovechó su paso por el juzgado para quejarse por la supuesta falta de medicamentos para la hipertensión y la diabetes que padece. “En Ezeiza cambian los médicos todo el tiempo“, se quejó ante los funcionarios judiciales. Dos agentes del Servicio Penitenciario Federal (SPF) lo observaban desde el pasillo del juzgado.

El empresario llegó a los Tribunales de Comodoro Py cerca de las 8.30, en medio de un fuerte operativo de seguridad, con casco, chaleco antibalas y rodeado de cuatro policías de la Federal.

En el escrito que presentó ante el juez, Báez intentó justificar la maniobra que detectó la Justicia para reingresar al país casi 33 millones de dólares mediante la compra de bonos. Dijo que fue una suerte de mutuo (préstamo) de Helvetic para poder presentarse, mediante una UTE, a la licitación de las dos represas en Santa Cruz, Néstor Kirchner y Jorge Cepernic, negocio que terminó perdiendo a manos de Electroingeniería. Ese fue uno de los motivos de la ruptura con el kirchnerismo: Báez siempre acusó por lo bajo a Julio de Vido y a Ricardo Echegaray de jugar en su contra.

La maniobra de los 33 millones de dólares, detectada en su momento por el fiscal José María Campagnoli, estuvo a cargo de Helvetic Group, la empresa suiza que se quedó con la financiera SGI de Puerto Madero, más conocida como “La Rosadita”. Para la Justicia es ilegal, pero la defensa de Báez intenta probar lo contrario.

Con esa maniobra se logró reingresar los fondos al país, entre fines de 2012 y abril de este año, y depositarlos en una cuenta de Austral en el Banco Nación.

Hay otras cuatro personas que deberán por ese mismo hecho, aunque los abogados de Báez ya habrían marcado el rumbo de la defensas. Mañana está prevista la declaración de Martín Báez, y la semana próxima están citados el abogado Jorge Chueco (también detenido en Ezeiza) y Néstor Marcelo Ramos, el responsable de Helvetic Service Group.

Según pudo saber Clarín, Ramos estaría viviendo en Buenos Aires, aunque la Justicia aún no lo pudo encontrar para notificarlo de la indagatoria.

Ayer, la sala IV de la Cámara Federal de Casación Penal confirmó la detención de Báez, que hoy cumple un mes en la cárcel.

Báez finalmente no accedió a la posibilidad de convertirse en un“imputado colaborador” de la Justicia para mejorar su situación procesal, tal como hizo Leonardo Fariña. Esta semana, el valijero le envió un mensaje contundente: “Les pido a a Lázaro y Martín que hablen y colaboren ante la Justicia”.

Fariña sabe de lo que habla. Su declaración ante Casanello fue clave para que el Tribunal Oral Federal 1 de La Plata le concediera la excarcelación en la causa por evasión. Desde entonces se sumó al plan de testigos protegidos del Ministerio de Justicia, que lo mantiene resguardado.