La piel de los niños es más fina que la de los adultos, se queman más y las quemaduras son más graves.
Dependiendo de la edad del niño los riesgos cambian. En los bebés la quemadura sucede sin que el niño haga nada activamente para quemarse. En el niño de 3-4 años la quemadura suele deberse a alguna travesura, pero en todos los casos son los padres los que deben de impedir que esto no pase.
¿Cómo evitar las quemaduras con agua o líquidos calientes?
A este tipo de quemaduras se les llama escaldaduras. Son el tipo de quemadura más frecuente en niños de menos de 5 años, sobre todo por debajo de los dos años.
Pueden deberse a que el niño se meta o lo metamos en el agua demasiado caliente del baño. Para evitarlo es necesario comprobar la temperatura del agua antes del baño, y si es posible poner la temperatura del agua que sale por el grifo a un máximo de 50 ºC.
Otras veces el niño se quema por tirarse o salpicarse con sopa, leche, agua caliente, etc.
También se puede quemar dentro de la boca al tragar alimentos líquidos demasiado calientes. Es muy importante cuando se usa microondas agitar el alimento antes de probar su temperatura, porque puede parecer frío si no se hace.
Resumiendo:
Graduar el agua doméstica, si se puede, a un máximo de 50 ºC.
Comprobar la temperatura del agua del baño antes de meter al niño, mejor con un termómetro.
Usar protectores para grifos para que el niño no los pueda manipular mientras se baña.
Hay que asegurarse que el niño no está cerca cuando se mueve comida de un sitio a otro.
Poner los líquidos calientes en el centro de la mesa.
Si se calienta la comida con microondas, revolverla o agitarla muy bien antes de ver su temperatura.
¿Qué otros puntos en la cocina tienen peligro de producir quemaduras?
– Cocinar en los fuegos de atrás y colocar hacia atrás los mangos de sartenes y cazos.
– Otro punto peligroso es la tapa del horno a la altura del niño, porque puede quemar sus manos al tocarla.
– Evitar que el niño toque la plancha y también su enchufe.
¿Cuál es el peligro de los enchufes?
La pieza de la pared está conectada a la red eléctrica. Si el niño mete los dedos puede cerrar el circuito y producirse una quemadura eléctrica. También puede ocurrir si coge una alargadera conectada al enchufe.
Consejos:
Los enchufes no utilizados deben estar tapados.
Nunca dejar alargaderas enchufadas a la pared libres por el otro extremo.
No dejar nunca al niño manipular electrodomésticos como secadores, planchas, tostadores de pan, cafeteras, etc.
Las chimeneas, las estufas, cerillas, mecheros, petardos… también queman
– Si se usa chimenea es conveniente poner una barrera protectora delante, incluso también de las estufas y radiadores.
– Cerillas y mecheros deben estar lejos del alcance y de la vista de los niños para evitar que jueguen con ellos.
– Los niños mayorcitos, sobre todo en el medio rural y en verano se pueden quemar con petardos y objetos similares. Son quemaduras que afectan sobre todo a las manos y a la cara.
¿Qué debo hacer si mi hijo se acaba de quemar?
Introducir la zona afectada en agua fría y mantenerla unos 10-15 minutos.
Si hay ropa adherida a la zona quemada no intentar arrancarla.
Si la quemadura es profunda o extensa acudir inmediatamente a un centro sanitario.