Un estudio científico llegó a la siguiente conclusión: las parejas que escuchan música con un volumen alto, están más tiempo juntas y tienen una vida sexual mejor. Es que la música “cambia los cerebros de las personas”.
La investigación fue llevada a cabo por el neurólogo Daniel J. Levitin, autor del libro This is Your Brain on Music: The Science of a Human Obsession (Este es tu cerebro con música: la ciencia de una obsesión humana). Para ello, encuestó a 30 mil personas sobre cómo escuchaban música. Luego, sumó a 30 familias de todo el mundo para participar en una segunda fase de la investigación.
En este último registro, las familias pasaron la primera semana como siempre lo hacían, sin música fuerte, y luego lo hicieron a todo volumen con el sistema Sonos y Apple Música, que patrocinaron la investigación. Escucharon 8.124 canciones a lo largo de intervalo de 44.000 horas de actividad registrada.
Con la música a un volumen alto, las familias pasaron un 13% más de tiempo juntos y estuvieron un 20% más próximos los unos de los otros. Este dato se vinculó a un incremento “importante” en la actividad sexual.
El estudio remarcó que la gente estaría mucho más contenta si incorporara la música a sus tareas diarias. Así lo admitió el 89% de los participantes, quienes también aseguraron que compartieron un 24% más de cenas juntos y que se sintieron “menos irritables”.
Levitin dijo que los resultados son consistentes con lo que ha observado en el laboratorio: la música cambia los cerebros de las personas. Cuando la gente escucha la música que le gusta, “la dopamina se libera en el sistema límbico del cerebro, dando una sensación de satisfacción”.
Esto se correlaciona directamente con los estudios del cerebro que muestran que la oxitocina se libera cuando se escucha música. Este producto químico es “responsable de ayudar a sentirse conectados con otros. Señala lo que en un entorno social es bueno y malo “, dijo Levitin