Portugal vivió su noche histórica. Por primera vez en la historia ganó la Eurocopa, su primer título internacional de mayores, al vencer por 1-0 a Francia en tiempo suplementario con un gol de Éder, que se transformó en el héroe inesperado.
A pesar de salir lesionado en el primer tiempo tras un golpe con Payet, Cristiano Ronaldo vivió la final a pleno. Pasó de salir llorando en camilla por el dolor, a pararse en el banco para dar indicaciones junto al DT Fernando Santos. Gritó, festejó, y hasta le avisó a Éder que iba a marcar.
La premonición del gol
“Cristiano me dijo: ‘tú tienes que anotar el gol del triunfo'”, explicó Eder después de marcar a los 108 minutos de juego el tanto que le dio a Portugal el título frente a la selección francesa. “Me pasó esa fuerza, esa energía que tiene él. Cristiano nos dijo que confiaba en todos. Y nos dio muchos ánimos. Y yo he demostrado de lo que soy capaz al marcar el gol decisivo”, agregó el delantero de 28 años, que actualmente se desempeña en el Lille de la Liga de Francia.
El golpe en el banco
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— delinquentweet (@delinquentweet) July 10, 2016