Desde hoy unos 1.200 efectivos de Gendarmería, Prefectura y Policía Federal reforzarán la custodia de las zonas más sensibles del Gran Buenos Aires.
Los reclamos vecinales de las últimas semanas en las distintas localidades del conurbano que terminaron con la multitudinaria concentración del 11 de octubre frente al Congreso Nacional pusieron en evidencia la urgencia de un plan contra la inseguridad.
La distribución de las fuerzas federales será en etapas y de acuerdo con las necesidades de cada distrito. El primer desembarco será en Avellaneda, Lanús, Lomas de Zamora y Quilmes, tal como se pactó durante una reunión con los intendentes.
La única ciudad del interior que por el momento recibirá la presencia de los federales será Mar del Plata. La ciudad, que tiene la tasa de homicidios más alta de la provincia de Buenos Aires y se ubica cerca de las más violentas del país, todavía no sale de la conmoción por la brutalidad del crimen de la adolescente Lucía Pérez.