Un repaso de sus desafíos, una apuesta a la unidad y un rival claro y omnipresente: Donald Trump . El discurso de aceptación de la candidatura demócrata de Hillary Clinton , anoche, en pleno prime time estadounidense desde el Wells Fargo Center de Filadelfia tuvo varios condimentos que marcaron el inicio de la verdadera carrera por la Casa Blanca de cara a las elecciones del 8 de noviembre.
Las frases:
“Es con humildad, determinación y confianza ilimitada en la promesa de Estados Unidos que acepto su nominación para presidenta de Estados Unidos”
“¿Tiene Donald Trump el temperamento para ser comandante en jefe? Imagínenselo en el Despacho Oval frente a una crisis real. Un hombre al que puedes provocar con un tuit es un hombre al que no se le pueden confiar armas nucleares”.
“Basta con la intolerancia y la grandilocuencia. Donald Trump no está ofreciendo un cambio real, está ofreciendo promesas vacías. Aquí está la triste verdad: No hay otro Donald Trump. Eso es todo”
“No dejen que nadie les diga que este país es débil. No lo somos. No dejen que nadie les diga que no tenemos lo que hay que tener. Lo tenemos. Y lo más importante, no crean a alguien que les diga: Yo solo puedo arreglarlo. Ninguno de nosotros puede hacerlo solo. Es por ello que juntos somos más fuertes”
“Donald Trump dice «Yo sé más de Estado Islámico que los generales». No, Donald, no sabés”.
“Donald Trump dice que quiere hacer a Estados Unidos grande de nuevo. bueno, podría empezar por efectivamente hacer sus cosas en Estados Unidos de nuevo”.
“Seré la presidenta de demócratas, republicanos e independientes; de aquellos que luchan, se esfuerzan y tienen éxito. De aquellos que me votan y aquellos que no; de todos los estadounidenses. Ganemos esto, juntos”
“No construiremos un muro… Vamos a construir una economía donde todo el que quiera un buen trabajo pueda conseguirlo (.) Cuando tenemos a millones de inmigrantes contribuyendo a nuestra economía sería contraproducente e inhumano expulsarlos”
“No estoy aquí para sacarles sus armas. Sólo no quiero que les dispare alguien que no debería siquiera haber obtenido un arma. Tenemos que curar las divisiones en nuestro país. No sólo por las armas. También por el racismo. Por la inmigración. Y más”
“Pongámonos en los zapatos de los jóvenes negros y los latinos que enfrentan los efectos del racismo sistémico, y están hechos para sentir como que sus vidas son descartables”.