Las confesiones de Emilia Attías estando embarazada

En pareja hace 11 años, Emilia Attías y “El Turco” Naím esperan la llegada de su hija Gina. Ella, embarazada de seis meses dio una entrevista en la cual habló de sus planes para el parto y posó para una increíble producción de fotos.

En una confesión íntima, Attias aseguró: “Traer un hijo al mundo es algo animal. Y yo estoy más sensible y eufórica, más hormonal. Soy una mujer muy activa pero, desde que estoy embarazada, no tengo ganas de hacer nada. Sólo quiero estar en mi nube con mi beba, disfrutar de la naturaleza e irme al campo. Es tan trascendental que no me quiero conectar con nada urbano”.

Además, agregó: “Estoy gestando vida y estoy fascinada con mi transformación física. Me gusta aislarme para meditar con mi hija. Tirarme al pasto bajo el sol y hablar con ella. Todo el tiempo le hablo a la panza. Estamos totalmente conectadas”.

A raíz de la preocupación por su peso, Emilia confesó cuánto engordó durante el embarazo: “Calculo que debo estar 5 ó 6 kilos arriba de mi peso y no se me notan porque están muy bien repartidos. Se me ve flaca pero estoy comiendo un montón, porque a partir del cuarto mes empecé a sentirme mejor. El hambre de embarazada es súbito y voraz. Si a las tres de mañana me agarra hambre y ganas de cenar me levanto y me cocino ¡unos fideos! Tengo antojos de cosas suculentas, como panes, pizzas y facturas y hasta leche con chocolate. No pasan dos horas sin que coma algo”.

“No me importa si engordo lo que tenga que engordar. Voy a darme los permitidos. Estoy dando una vida, no es tiempo de ser sexy y hembra. Por más que lo sea, ahora estoy más conectada con mi hija. No llevo ninguna dieta y mi manera de transitar el embarazo es como la de cualquier otra mujer. Como sano y mucha fruta y me gusta hacer caminatas porque me oxigenan”, contó la actriz.

Además, habló sobre los beneficios de yoga: “Cuando puedo hago yoga en casa para el dolor de cintura. Está bueno porque te prepara en las posturas para un buen parto y a bancar bien los últimos meses de la panza, cuando el peso del bombo acarrea dolores de espalda. Pero no más que eso. No tengo complejos, ni miedo a engordar, sólo me cuido la piel por las manchas del sol y las estrías. Pero el peso ganado o la celulitis son cosas que se acomodan apenas tenés a tu hija, volviendo a tu rutina física, amamantando y tomando mucha agua”.

Finalmente, Emilia confesó: “Siempre dije y, es lo que voy a intentar hacer, que prefiero que no me hagan el tajito (episiotomía) ni que me apliquen la peridural. Quiero parir sin anestesia, tener un parto natural, como cualquier hembra”.